Lionel Messi y Pep Guardiola dejaron su huella para siempre en Barcelona y más allá de los títulos, ese equipo que ganó todo entre 2008 y 2012 es considerado uno de los mejores de todos los tiempos por su estilo, su propuesta y obviamente por la enorme categoría de sus jugadores pero 15 años después nos enteramos que la historia pudo haber sido muy distinta y que ambos estuvieron a punto de irse al Getafe en 2005.
Así lo reveló el presidente del club madrileño Ángel Torres en diálogo con el diario Marca y sorprendió a todos: “En el primer o segundo año de Messi, lo tuvimos casi hecho para que viniera al Getafe en calidad de cedido. Al final, Rijkaard no aceptó y nos quedamos con las ganas”. El crack rosarino había debutado hacía muy poco tiempo y en ese entonces era una gran promesa pero le faltaba para terminar de explotar todo su potencial, algo que terminaría logrando con Guardiola para convertirse en el mejor jugador del mundo.
Y justamente Pep es el otro protagonista de la anécdota del directivo madrileño porque cuando el holandés se fue del Barcelona, como entrenador del equipo B catalán, él era el candidato natural para reemplazarlo pero a Txiki Begiristain, director deportivo azulgrana por entonces, no lo terminaba de convencer y pensaba en Michael Laudrup, DT del Getafe en esa época. Torres reveló que estaba todo acordado: el trato era que Laudrup se marchaba al Barça y Guardiola lo reemplazaba, aunque finalmente Pep escaló al primer equipo apadrinado por Johan Cruyff. El resto es historia. Y de la más rica del fútbol mundial.
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