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Los cuatro nadadores estadounidenses supuestamente asaltados a mano armada en Río de Janeiro durante los Juegos Olímpicos pasaron rápidamente de ser víctimas a victimarios, acusados de falso testimonio, ya que los jueces encontraron serias contradicciones en sus declaraciones.
Algunas versiones indican que los atletas no sólo estaban pasados de alcohol sino que también habían protagonizado una fiesta con otras señoritas y por eso habrían inventado la historia del robo para justificar la llegada a altas horas de la madrugada, ya que la bella conejita de Playboy Sara Ray Reid también se encontraba en Río. Vale la pena conocerla.
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