El capitán de Los Pumas, Julián Montoya, analizó el Mundial del combinado argentino y admitió: "Estamos tristes pero podemos estar orgullosos de que dimos todo. Yo estoy orgulloso que luchamos hasta la última pelota".
"Esperamos haber inspirado chicos y hacer que la gente confíe en los procesos, que laburando y creyendo en el otro las cosas pueden salir bien", reflexionó el forward.
Montoya puso el foco en el partido por el tercer y cuarto puesto frente a Inglaterra y sentenció: "Fue un partido cerrado. No pudimos aprovechar cuando tuvimos superioridad, los fuimos a buscar y estuvimos ahí, fue duro".
El hooker apuntó al futuro y afirmó: "Nosotros pasamos pero la camiseta sigue, va a estar para siempre. Ser el capitán de este equipo es el orgullo más grande que me tocó".
GT