PSG eliminó al poderoso Bayern Munich en una serie inolvidable, con resultado incierto y mucho sufrimiento hasta el final, que terminó con el pitazo final en el Parque de los Príncipes para darle rienda al tremendo desahogo de Neymar, que se fundió en un abrazo con Leandro Paredes en la cara de Joshua Kimmich.
El crack brasileño fue la gran figura de la revancha de los cuartos de final y solo le faltó el gol que le negaron el palo, el travesaño y Manuel Neuer en distintas oportunidades para coronar una noche brillante. Y justamente por ese gol que nunca llegó, Bayern Munich también tuvo sus chances para revertir la serie.
Al grito bien argentino de "La puta madre", Neymar se abrazó con Paredes pero la euforia era tanta por eliminar al último campeón y la clasificación a cuartos de final que en la zona mixta, el brasileño interrumpió la entrevista de Ángel Di María para abrazar al rosarino.
Neymar fue el líder futbolístico de un PSG que sueña con su primera Champions y tiene con qué ilusionarse y seguramente será uno de los que le ponga sabor a los festejos.
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