Nadie puede discutir a Pep Guardiola y negarlo como uno de los mejores entrenadores del Siglo XXI pero también es cierto que desde que se fue de Barcelona no ha logrado llegar a lo más alto con Bayern Munich ni con Manchester City, dos equipos muy poderosos en sus respectivas ligas que aspiran a conquistar Europa todos los años.
Con el gigante alemán la Orejona se le negó tres años consecutivos en semifinales y ya en Inglaterra sufrió dos duras eliminaciones recibiendo muchos goles en contra (global de 6-6 vs Mónaco en octavos de final en 2017 y 1-5 vs Liverpool en cuartos de 2018).
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Con esos antecedentes, medios españoles (sobre todo madrileños) y del resto del mundo destacaron el planteo defensivo del catalán para enfrentar este martes al Tottenham, mucho más cauteloso de lo que acostumbra. "El City de Guardiola sigue arrugándose en los momentos decisivos de la Champions", tituló Marca. "Guardiola se traicionó: ocho defendiendo sin saber qué hacer en el gol", criticó AS.
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Sin embargo, a Pep no le pareció un mal partido de su equipo y se fue del nuevo estadio del Tottenham esperanzado de poder revertir la serie y meterse por primera en semifinales desde su llegada al City: “Cuando no juego bien lo digo, pero no tengo esa sensación hoy. Ellos son un equipo que presiona mucho, pero no han podido cuando hemos llegado tantas veces al ataque”, fue la lectura de juego del DT.
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