En el futbol portugués, un hincha ingresó en el campo de juego durante el partido entre Porto y Vitoria Guimarães, por la 29a. jornada del campeonato local, primero amagó con abrazar a uno de los futbolistas, pero terminó arrojándoles patadas a dos de ellos. Fue reducido por el personal de seguridad y retirado de la cancha.
El incidente ocurrió en el tiempo suplementario del segundo período, con Porto ganando 1-0. En el minuto 93, cuando el árbitro ya había marcado 6 minutos adicionales, el aficionado eludió la seguridad, saltó al campo de juego y, en actitud tambaleante, se acercó al capitán del Vitoria, Rochinha, inicialmente extendiendo los brazos mientras caminaba hacia él, pero luego le arrojó una patada. Segundos después, el hincha cambió de dirección e intentó darle otras patadas a un segundo futbolista de Vitoria Guimarães, Geny Catamo, pero éste se apartó a tiempo.
De inmediato se generó un gran tumulto dentro del campo de juego, alrededor del agresor. Uno de los que intercedió fue Pepa, el entrenador de Vitoria Guimarães. El hincha fue derribado por la seguridad y retirado del terreno de juego.
Más allá del momento incómodo, Porto terminó imponiéndose a Vitoria Guimarães por 1-0 y recuperó la ventaja sobre el Sporting Lisboa en la cima del campeonato: 79 puntos contra 73 del único escolta.