Facundo Moyano, sigue el camino de su padre Hugo Moyano y se pondrá al hombro las riendas de un club. Mientras Hugo espera las elecciones en Independiente, Facundo estará a cargo de las decisiones del equipo de Mar del Plata.
Se esperaba una comunicación oficial de la transición de mando, pero no sucedió. Luego de la licencia de Wenceslao Méndez, Moyano confirmó en su Instagram que tomaba el lugar vacío: "Asumí como presidente de Alvarado. Es una alegría inmensa poder estar en el club que es parte de mi historia familiar y afectiva", escribió.
"Fui presidente en 2013 cuando ascendimos al Argentino A pero duró poco ese momento por una interna en la barra. Nosotros habíamos tomado la decisión de sacarla. Hubo una seria de conflictos que no podíamos superar. Nos alejamos un tiempo y volvimos con Pablo Mirón como presidente y yo como vice", detalló en diálogo con La Capital de Mar del Plata.
A falta de una fecha para que culmine el torneo de Primera Nacional, Alvarado se ubica octavo, en la Zona A, con 42 puntos, a 14 unidades del último puesto al Reducido por el ascenso a la Primera División. "Es una categoría difícil en la que siempre está la polémica con los arbitrajes. No solamente en nuestra zona sino también en la otra, donde hay un equipo que está más ligado a las autoridades de AFA. Nosotros hemos sido históricamente desfavorecidos por los arbitrajes", expresó.
Agrego: "Hace más de 20 años que estoy ligado al club y en este momento quiero ponerme el club al hombro y darle todo lo que tengo en términos de relaciones, salir a buscar sponsors, terminar obras que faltan. Quiero darle relevancia a otras disciplinas del club, más allá del fútbol"
Ya sueña con revivir el clásico de Mar del Plata. "Uno de los grandes objetivos es darle al fútbol argentino el Alvarado-Aldosivi. No puedo prometer un ascenso, pero voy a poner todo para que se den las condiciones para ascender. Es el gran objetivo", remarcó.
