jueves 28 de marzo del 2024

La historia de Rodrigo Aliendro: de repartir pizzas a ser jugador de River

El volante firmó su contrato y fue presentado como refuerzo del Millonario pero para llegar hasta ahí luchó y tiene una historia de vida, casi de película.

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La historia llegó a su fin y Rodrigo Aliendro logró ponerse la camiseta de River. El Peti luego de varios días negociando, el ex Colón ya estampó su firma con el Millonario. Pero antes de llegar al club de Núñez, Aliendro pasó de lo más bajo para llegar a lo más alto.

Un comienzo difícil para el jugador en el mundo del fútbol. Se inició en Argentinos Juniors pero quedó libre a los 17 años. Con muy pocas citaciones y menos chances de ser titular en las juveniles del Bicho.

Luego llegó el turno de Chacarita, club a donde fue a tratar de cambiar de suerte y perseguir su sueño. Tres colectivos para llegar al predio del Funebrero se tenía que tomar. Ahí estuvo desde los 18 años, pero recién a los 21 tuvo su debut (ante San Lorenzo por la Copa Argentina del 2012).

Pero le tocó irse de nuevo. Está vez más abajo, ya que Chaca perdió la categoría. Fue a préstamo a Ituzaingó de la Primera C y ahí tuvo que buscarse otro trabajo porque el sueldo del club no alcanzaba.

Entonces fue cuando comenzó su etapa como delivery de pizzas y empanadas: "Siempre les agradezco a los dueños de la pizzería por el laburo. Fue un momento lindo. Lo disfrutaba, no es que era un trabajo que me costaba. Iba a entrenar a la mañana y a las siete de la tarde llegaba a la pizzería y me quedaba hasta la medianoche", recordó en TyC Sports.

Regresó a Chacarita, ya con más partidos en lomo y tuvo más participación en el plantel que logró el ascenso a la B Nacional. Ya en 2016, llegó el llamado de Atlético Tucumán y ahí mostró más su talento, siendo una pieza clave del Decano, jugando copas internacionales y formando una gran dupla con el Pulga Rodríguez

Luego de tres años firmó con Colón, y ahí consiguió su primer título y el del Sabalero: la Copa de la Liga Profesional

En su etapa en el club de Santa Fe, también sería subcampeón de la Copa Sudamericana en 2019. Ya pidiendo un cambio de aire, no firmó su renovación de contrato y lo disputaron Boca e Independiente, River miró de lejos y cuando pudo atacar fue con todo para llevarse a un talentoso volante de 31 años.