El presidente de Racing, Víctor Blanco, se convirtió en un pescador: aprendió a esperar. Mientras en la otra vereda de Avellaneda Independiente anuncia algo una semana y lo deshace a la siguiente, en la Academia todo se cocina lento, sin ningún apuro.
El que baja esa ley es el propio Blanco, quien tuvo el fin de año más convulsionado y contrastante de su carrera dirigencial. Por un lado, Diego Milito renunció a la secretaría técnica, le indilgó responsabilidad, el equipo quedó eliminado de la Copa Libertadores y Sebastián Beccacece anunció que también se iba. Por el otro, los socios y las socias de Racing le brindaron un apoyo contundente para ganar su tercera elección con el 71,4% de los votos y así presidir el club por otros cuatro años.
Con una comisión directiva recientemente conformada –un espacio en el que de ahora en más deberán convivir larretistas, peronistas y kirchneristas–, en Racing quieren primero resolver quién será el secretario técnico para luego elegir al reemplazante de Beccacece.
Hasta el momento, Blanco habló con dos personas para que asuman en el cargo que dejó Milito. Son dos personas vinculadas al club por su pasado de jugadores: Claudio Úbeda y Rubén Capria.
Blanco parece decidido a buscar el sucesor de Milito entre quienes tengan algún vinculo histórico o sentimental con Racing. A diferencia de lo que intenta Independiente –fue a buscar a Nicolás Burdisso como mánager-, ese puesto parece destinado a alguien ya enlazado con los hinchas (al menos con los hinchas del pasado).
Una vez elegido y nombrado el nuevo secretario técnico, ahí será el momento de elegir DT. Hay ofrecimientos que llegan casi todos los días. Lo que antes eran carpetas, ahora son mensajes de WhatsApp y PDFs que los representantes preparan y le envían al presidente.
Blanco ya sabe de lo que se trata. “Me mandaron de acá, de Uruguay, de Colombia, hasta de España”, le contó a PERFIL en 2016, cuando Ricardo Zielinski se había ido y Racing buscaba entrenador.
Entre esa lista enorme, algunos nombres reunieron interés. Hernán Crespo, Guillermo Barros Schelotto, Gustavo Costas o Alexander Medina, por citar solo cuatro.
Pero hay uno que aunque parezca más relegado puede tener ventaja: se trata de Diego Davobe. La influencia de Christian Bragarnik en Racing, la relación de Davobe con Mauro Gerk, actual entrenador de la Reserva (los dos eran parte del cuerpo técnico de Diego Cocca) y su gran momento en Argentinos Juniors lo posicionan como un candidato posible a dirigir el equipo.
Pero para eso habrá que esperar. Blanco –y su nueva CD- quieren primero confirmar al secretario técnico. El tiempo, al menos en esta época del año, no parece ser un problema.