viernes 31 de enero del 2025
Un reinado que no es para cualquiera

Regresa el Príncipe que desea sentarse en el trono del Rey: Neymar y sus años dorados en el Santos de Pelé

El retorno al origen: los mejores momentos de una joven leyenda brasilera que buscará cerrar su legado en donde todo arrancó.

"El príncipe que nunca quiso ser rey", una frase que acompañó, acompaña y acompañará a Neymar da Silva Santos Júnior por el resto de su carrera futbolística. Sin embargo, el brasilero nunca quiso ser rememorado con aquel enunciado y prestigio de ser alguien de la realeza, aunque lo fue por unos instantes. Se cansó de la fama, del dinero y de la falsa felicidad que le pintaron de color oro, tanto en Barcelona, París o en Arabia, y regresó a la alegría, al carnaval y al Jogo Bonito del Santos de Brasil, donde realmente encontró y encontrará, nuevamente, su riqueza.

Santos

Este mismo jueves, Neymar Junior confirmó, a través de sus redes sociales, su retorno al Santos del estado de San Pablo, club al cual no representa desde hace más de 12 años.

A pesar de que enciende la ilusión de muchos fanáticos del fútbol mundial, en especial la de los hinchas del Peixe, la dura realidad es que jamás volveremos a observar a aquel Menino da Vila que nos supo enamorar con sus jóvenes pies y con sus ansias de divertirse con ese simple objeto al que llamamos pelota.

Ney regresa al equipo blanquinegro con 32 años, apunto de cumplir sus 33 este mismo 5 de febrero, por lo que su cuerpo le impedirá ser ese chico que jamás se cansa y tiene ganas de más. No obstante, vuelve con una mentalidad de adulto, la cual no le estorbará a la hora de paralizar al mundo con sus regates y fintas. "El entusiasmo es todo. Debe ser tenso y vibrante como una cuerda de guitarra", dijo alguna vez el Rey de este reino, Pelé.

 La juventud tiene un brillo que se apaga con la experiencia, pero la experiencia tiene una luz que nunca se apaga. Como se expresó anteriormente, es una realidad que el ex top 3 del mundo no volverá a ser lo que alguna vez fue cuando tenía 20 años y era una proyección mundial. No obstante, sus mejores actuaciones y sus años dorados siempre estarán presentes en el corazón y en los botines de cualquier futbolero.

neymar

"Menino que vale ouro" - Debut - 2009

Luego de pasar por las inferiores del Santos en 2003, donde ya era comparado con tan solo 11 años con genios como José Macia Pepe, Robinho y el mismo Pelé, Neymar llegó a las manos de Vágner Mancini, entrenador del Alvinegro en 2009, quien rápidamente lo sacó de las inferiores para hacerlo debutar. 

Y así fue, con tan solo 17 años, hizo su debut profesional el 7 de marzo de ese mismo año, cuando en los últimos treinta minutos del partido ante el club Oeste, el cartel de sustituciones levantó dos números: el 11 de Mauricio Molina y el 18 de un joven Neymar, quien era apodado como el Menino que vale ouro (el chico que vale oro).

Un chico flaco y chiquito, a quien nadie le daba ni dos pesos, terminó sorprendiendo por completo, específicamente a los muchachos del club Oeste, quienes sufrieron las ansias, el anhelo y la afán de un garoto: apenas la tocó, gambeteó, desbordó y estrelló su remate en el palo. Una pequeña joya que tenía el poder de ser esa persona pequeña, capaz de hacerse sentir único.

Las perlas nunca tardan en resaltar. A tan solo una semana de su nacimiento del fútbol, Neymar marcaría historia: ese 15 de marzo, el oriundo del pueblo de Mogi Das Cruzes marcó su primer gol como profesional, una anotación que será recordada en los libros de este deporte. Una puerta nueva, para una joya en pleno resplandor.

"Jogador mais que importante" - Las primeras consagraciones - 2010

A tan solo un año de su debut como profesional, el niño de Brasil debía seguir brillando y así lo hizo. Ya con el número 11 bajo su delgada y refinada espalda, Ney se consolidó como la estrella de su equipo, anotando 14 goles en 19 partidos en el Campeonato Paulista.

Como era de esperarse, el Santos se terminó llevando esa competición en aquella temporada, específicamente el 2 de mayo del 2010, en un partidazo ante Santo André el cual terminó 5-5. Nunca antes habían visto a un Neymar tan enfocado como en ese día: deslumbró al público y marcó un doblete para darle el triunfo al equipo de sus amores y conseguir así, su primer trofeo como futbolista profesional. 

Para coronar ese gran año, aún faltaba un desafío más: La Copa Do Brasil. La 22° edición de aquel galardón era una realidad. Neymar frente a otra contienda que superar, algo que no fue para nada difícil para el pequeño príncipe.

 Tras una ida muy conforme para el equipo y para el mismo brasileño, quien marcó un tanto, el 5 de agosto del 2010, se jugó la vuelta de una final épica ante el club Vitória. Un resultado cómodo de 2-0 había relajado al ya Santos de Neymar, pero un 2-1 en la vuelta lo asustó por completo. Los de Bahía lo intentaron, pero se olvidaron que los de Santos tenían a su figura tocando el cielo con sus mismos pies.

"Vai levitando o jogador do Santos" - Una temporada magistral - 2011

Habiendo quedado en el tercer lugar en el premio al Futbolista del año en Sudamérica 2010, Neymar arribó al 2011 siendo la estrella absoluta de su equipo y con un sueño: devolverle la Gloria Eterna al club que tanto ama.

A pesar de tener todas las ilusiones de quedarse con la Copa Libertadores, el ahora recordado y mítico número 11 tenía otra cita con la cual debía terminar antes de cumplir el anhelo de la temporada: tuvo la responsabilidad de bicampeonar con el Campeonato Paulista.

Una vez más, Neymar demostró los frutos de su destreza y maravilló al mundo con su gran actuación en el torneo de su país y, en la final, superó con creces la expectativa: marcó el tanto de la victoria y le arrebató el campeonato al Corinthians.

Liderada por la tercera generación de los Meninos da Vila, el Santos se enfocó y demostró por qué merecía el máximo campeonato a nivel clubes de Sudamérica. Un chico de tan sólo 18 años lideraba una institución que acababa de cumplir 100 años desde su creación. La juventud es como el agua: escurridiza y vital.

Ambición que en el camino se regaba con diversión. Si bien, ganar la Copa Libertadores era su deseo más grande, Ney no paraba de sonreír y de jugar por cada instancia en la cual competía. Desde octavos de final, no paró de ser determinante, dando al menos un gol o una asistencia en cada fase de eliminación. 

Y finalmente, el 22 de junio, el joven príncipe se atrevió a reinar la capital del Santos. Neymar, el nombrado heredero del rey Pelé, aquel joven con una técnica para el gambeteo y la samba brasilera, consiguió proclamarse con una corona que muy pocos obtienen: la Copa Libertadores

La misma fue alcanzada tras derrotar al mítico Peñarol de Uruguay en una épica final ida y vuelta, donde en Uruguay el cotejo quedó igualado a 0, por lo que todo se definió en Brasil con un 2-1 a favor del Peixe, quienes consiguieron su tercera conquista y la última hasta la fecha.

Sin embargo, la temporada del brasileño se teñiría de oro una vez más, pero esta vez dejando asombrado a uno de sus mayores ídolos: Ronaldinho Gaúcho.

Para muchos, el mejor gol de todos los tiempos, para otros, una simple genialidad de un mago o una simple obra de arte de un artista que no utilizó sus manos, si no que se aprovechó de sus dos sencillos botines. Ganador del Premio Puskás, derrota por 5-4 ante el Flamengo: simplemente ver para creer.

 

"A despedida de um crack" - El hasta luego - 2012/2013

Su alteza debía irse a conquistar los reinos del Viejo Continente, donde poco a poco, se iba convirtiendo en el centro del fútbol mundial. Toda aquella época en donde la belleza nacía y moría en Sudamérica, había terminado. Los mejores jugadores buscan oportunidades en otros óptimos lugares. De todas maneras, aún quedaba algo de magia para desatar en el Santos.

El 2012 para Neymar fue un año de nuevos aires que aspiraban a un recambio prometedor. Si bien su cuerpo residía en Brasil, su mente y sus ambiciones de ganar pertenecían al fútbol de Europa.

Un garoto ya consolidado, jugó la tan recordada final de la Copa Intercontinental ante el Barcelona, club en donde se escribirían más capítulos de su extensa historia. La superioridad del Barça no pudo ser derrocada por la astucia y la sangre del joven brasileño, por lo que perdió el famoso encuentro por un abundante 4-0. No obstante, su grandeza enamoró a toda la ciudad de Cataluña.

A pesar de no haber podido conseguir la cuarta Copa Libertadores para su equipo, el sucesor del Rey no dejó con las manos vacías a su equipo, por lo que se consagró por tercera vez consecutiva con el Campeonato Paulista, derrotando por 4-2 al Guaraní de Campinas.

Si puedes escribir el comienzo de una historia, es porque existe un final. A pesar de no haber sido lo mejor a nivel colectivo, Ney consiguió récords inigualables en esta temporada: 42 goles en 47 partidos, un verdadero ícono que era la envidia y el deseo de cualquier niño de Brasil.

El 26 de mayo de 2013, Neymar salió al campo del Estadio Vila Belmiro por última vez como jugador de Santos. El sol de la tarde caía sobre las tribunas, como si el mismo cielo llorara la partida de su estrella. No era un adiós cualquiera; era el final de una era, el cierre de un capítulo que parecía interminable, pero que había llegado a su fin.

 Neymar disputó de su último partido vistiendo la camiseta del Santos. En aquel instante, los recuerdos, anécdotas y alegrías de aquel niño que debutó con 17 años, se demostraban en un rostro totalmente entristecido: la ciudad estaba devastada, al igual del mismo príncipe, quien no aguantó las lagrimas.

La despedida fue agridulce. Las lágrimas de Neymar fueron la expresión de un alma dividida entre el amor por su tierra natal y la necesidad de seguir adelante. El príncipe de Santos estaba listo para emprender el vuelo hacia nuevos horizontes, con la promesa de conquistar el mundo entero.

Nunca olvidó en dónde fue feliz, porque aunque el planeta lo llevó a nuevas tierras, su alma siempre regresaba a Urbano Caldeira, el lugar que lo vio soñar, crecer y ser el ídolo de un pueblo que, a pesar del tiempo y la distancia, siempre lo tendrá como a su propio príncipe.

 

FMZ

 

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