El vicepresidente de River, Matías Patanián, estuvo anoche cenando en Madrid con Omar Rodriguez, allegado al enganche vasco Iker Muniain, para mostrar el interés real de contratarlo. Si bien ya se lo había hecho saber el propio Martín Demichelis al jugador a inicios de este año, ahora el club de manera abierta se sentó a negociar.
Muniain, que varias veces hizo público su sueño de jugar en River, quedó libre del Athletic Bilbao donde jugó toda su carrera y va a recibir en los próximos días una oferta de contrato por dos temporadas. Las noticias desde Madrid aseguran que las chances son altísimas y que la fecha tope de resolución es el 9 de agosto, claro que antes el Millonario debe resolver el cupo de extranjeros.
Este tema se va a resolver dicen en River porque en estas horas Paulo Díaz firma la doble ciudadanía y libera un cupo. Así, la Banda tendría 6 extranjeros: Sant'anna, Boselli y Fonseca (uruguayos), Borja (colombiano), Bareiro (paraguayo) e Iker Muniain.
De todos modos, por disposición de la AFA la planilla sólo puede firmar 5, pero en el caso de River quedan habilitados todos porque Borja ya tiene los 10 partidos oficiales en la selección nacional. De todos modos, por los años jugados en la Argentina de Bareiro, también le corresponde la doble ciudadanía que está en trámite.
Lo cierto es que la presencia de Patanian en Madrid y la reunión por Muniain deja en claro que River no se retiró del mercado y que la búsqueda por un volante mixto y desequilibrante sigue en pie con el nombre de Rodrigo Garro. La posibilidad de Muniain es firme y de concretarse sería una ficha top para un jugador que tiene 31 años, 15 años de carrera profesional, 579 partidos, 79 goles y 54 asistencias y un perfil de líder que le vendría muy bien a la nueva etapa de Demichelis.
El fanatismo de Muniain por River
El propio Muniain, en sus redes sociales y en varias entrevistas, habló de su amor por River y eso se certifica en dos momentos de la historia del club: el descenso y la final de la Copa Libertadores en 2018.
A mediados de 2012, el vasco sorprendió a todos y dio el puntapié inicial: "Bajamos porque, como se suele decir, es el único título que nos queda por ganar. El año que viene estamos otra vez en Primera. River Plate es un equipo que siempre me ha gustado, sobre todo por la gran hinchada que tiene, siempre alentando al equipo, y la verdad es que le admiro muchísimo. Sigo todos los partidos y le deseo lo mejor", remarcó.
Luego explicó: "Cuando eres pequeño y ves por la tele, por ejemplo los Clásicos River-Boca, y siempre te decantas por uno. Yo me decanté por River y hasta el día de hoy tengo esa ilusión por River y por toda su hinchada".
Pero lo del 2018 superó todo y él mismo lo contó: "Llamé a Omar, una persona de confianza, y le dije que alquiláramos una furgoneta para ir a Madrid. Llegamos y había 50 mil personas de River Plate. No podía ir así con la cara descubierta. Me cogí una peluca, unas gafas, una gorra y una bufanda y salimos a la calle", relató.
"Fui como un barra brava y había un control de seguridad. Entonces, estaba la Policía Nacional esperando. Llego yo con mi peluca, mis gafas, se me queda mirando un policía y pienso que me ha reconocido. Me mira la cara y me dice 'pase pase'. Cuando llevo 50 metros me doy la vuelta y el policía está mirándome". Más hincha no se consigue.
*Texto especial de Leo Peluso
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