Sebastián Battaglia es hoy el entrenador de Boca que va a disputar el próximo miércoles la final de la Copa Argentina ante Talleres, en Santiago del Estero, pero para llegar a esa instancia la mayor parte del camino la recorrió el "xeneize" bajo la conducción de su antecesor, Miguel Ángel Russo, algo que hoy su reemplazante reconoció públicamente.
"Russo tiene mucho que ver con esto por su trabajo anterior, especialmente cuando dejaron afuera a River, algo que siempre es bueno para Boca, y gracias a eso hoy estamos en una nueva final", destacó Battaglia en diálogo con el sitio oficial de la Copa Argentina.
"Después vinieron otros rivales muy difíciles, todos muy complicados, y ya me tocó estar a mí acompañando el camino hasta esta final, así que trataremos de sacarla adelante para sumar otra estrella que sería muy importante para el grupo, para el club en general y para mi en particular", apreció.
Boca llegará mañana por la tarde a Santiago del Estero, donde se llevará a cabo la final el miércoles en el estadio Único-Madre de Ciudades, y Battaglia palpitó de antemano el recibimiento que seguramente tendrá el "xeneize".
"Los santiagueños siempre nos reciben de manera impresionante, porque hay una locura por Boca, igual que ocurre en otros lugares del interior del país, así que iremos a un sitio donde nos quieren mucho, y a jugar en un estadio magnífico", exaltó.
"Y enfrentaremos a un rival como Talleres que también es un merecido finalista, porque viene haciendo las cosas bien y se nota que es un club muy ordenado. Por eso deberemos tener todas las luces prendidas si pretendemos superarlo", alertó finalmente Battaglia, que el 8 de noviembre cumplió 41 años y va por su primer título como entrenador de primera división.