En un torneo barrial en el complejo Estación 98 ubicado en el partido bonaerense de Avellaneda un jugador amateur reaccionó de manera violenta sobre el árbitro del partido por una expulsión. El jugador en cuestión lo atacó pegándole una patada en la cabeza.
El episodio fue captado por una de las personas que observaba el partido donde se puede apreciar que el árbitro del partido le saca la segunda tarjeta amarilla a uno de los jugadores del equipo de camiseta marrón y, en consecuencia, la tarjeta roja.
De inmediato el jugador expulsado empujó al árbitro, pero luego otro de los jugadores del equipo involucrado se metió en la discusión. Sumado a los empujones del jugador expulsado, un compañero corrió hacia el árbitro, le pegó una piña en la cara arrojándolo al suelo.
Una vez en el suelo lo pateó en la cabeza, generando la reacción inmediata de los demás protagonistas para separarlo y evitar una tragedia.
Respecto al árbitro fue trasladado de urgencia para conocer la gravedad de la lesión, pero no se prestaron declaraciones respecto a su estado. Luego en cuanto a la responsabilidad de lo sucedido recae en la organización del torneo.