Quilmes ganó y se despegó del Rojo

Quilmes le ganó este sábado 2-1 a Arsenal en el Estadio Julio Humberto Grondona y dio un paso clave para la permanencia en la Primera División de la AFA.

Es más, con este resultado, Independiente, que quedó muy comprometido con los marcadores de este sábado, ya no lo podrá alcanzar a Quilmes en los Promedios.

Quilmes fue paciente y aprovechó sus momentos en el partido para golpear, por intermedio del uruguayo Martín Cauteruccio y Damián Leyes.

Los locales, en tanto, fueron de mayor a menor, dado que se habían puesto en ventaja por intermedio de Jorge Ortíz, pero terminaron con nueve hombres por las expulsiones de Nicolás Aguirre y Darío Benedetto.

Arsenal tomó la iniciativa del encuentro, fue profundo y estuvo a punto de marcar a los tres minutos con un centro de Hugo Nervo por la derecha, que Mariano González conectó, pero desvió el remate cerca del palo derecho.

La diferencia en su favor la consiguió el local a los 6 minutos, cuando, tras un córner, Ortíz tomó un rebote en la puerta del área y con un zapatazo imponente metió el esférico en el ángulo superior derecho de Emanuel Trípodi.

Sin embargo, una vez que consiguió la ventaja, Arsenal dejó de abrir la cancha, resignó el peligro y empezó a jugar de contraataque. Quilmes aprovechó la chance que le dio Arsenal. Avisó el visitante con un bombazo de Cristian Menéndez que tapó en dos tiempos el arquero Cristian Campestrini y, a los 35, igualó por intermedio de Cauteruccio. El uruguayo dominó un pelotazo de Ernesto Goñi, le ganó la posición a Diego Braghieri y definió ante Campestrini. A partir de entonces el juego se hizo muy cerrado y parejo.

El segundo período había empezado muy tibio, con Arsenal intentando reencontrarse con su mejor línea de juego. Buscaba ser prolijo frente a un adversario que aguardaba la chance para tratar de obtener los tres puntos tan valiosos.

A los 9 minutos, tras un pase de Ortíz, Benedetto fusiló al arquero, pero el tanto fue mal anulado por una posición adelantada que no existió.

Con el correr los minutos, la búsqueda de Quilmes se hizo más intensa, a pesar de su falta de recursos técnicos y, a los 26, llegó el gol de la victoria, mediante un centro pasado de Cauteruccio, que bajó Leyes a la altura del segundo palo para rematar abajo y a la derecha de Campestrini.

La impotencia de Arsenal sobre el final derivó en dos expulsiones, la primera de Aguirre y luego la de Benedetto, por sendas faltas antideportivas, por infracciones en perjuicio de Cristian Lema.

En inferioridad numérica, Arsenal generó su chance más clara para igualar, a los 44, cuando Julio Furch consiguió sacar un remate desde fuera del área que atajó Trípodi.

En definitiva, Quilmes tuvo su premio a la fuerza de voluntad y a la insistencia y, con estos recursos, logró imponerse, a pesar de la mayor jerarquía del anfitrión.

Fuente:DyN