Poner un defensor para cerrar el partido, una premisa que no siempre funciona en el fútbol. Con esa intención Erik Ten Hag mandó a la cancha a Lisandro Magallán a los 88 minutos para potenciar el juego aéreo del Ajax que a esa altura ya no podía tener la pelota, estaba nervioso y solo quería que se terminara el sufrimiento.
Sin embargo fue justamente el exBoca el que se resbaló, llegó tarde a la cobertura de su marca y con estas facilidades, Tottenham entró tocando al área y Lucas Moura le puso el moño a su noche inolvidable con un triplete.
Luego, las redes sociales hicieron el resto. Los hinchas de River y los de Boca se unieron para burlarse de Magallán por el tercer gol, por la final que se jugará en Madrid, por su mala suerte y por la cifra que pagaron los holandeses por su pase. Motivos varios para que toda la crueldad apuntara contra el defensor.



