Desde que el plantel de Boca Juniors ingresó al estadio de Vélez Sarsfield los hinchas locales apuntaron con toda su verborragia contra Mauro Zárate, en la previa del duelo de ida por los cuartos de final de la Copa de la Superliga.
Gustavo Alfaro diagramó una formación en la que colocó al ex delantero del Fortín entre los titulares y el clima quedó tenso. Ni bien pisó el césped del José Amalfitani, Zárate fue tratado como un "traidor" cada vez que se movió antes del pitazo inicial de Diego Abal.
La mayoría de los hinchas de Vélez cantaron y alentaron por encima de la entonación del Himno Nacional de la Argentina. Sobre las estrofas finales, desde las tribunas del estadio bajó un rotundo "borombombooon borombombooon, el que no salta, es un traidooor".
Un acto repudiable que hasta el mediocampista uruguayo del Xeneize Nahitan Nández reprochó.
CV