El Gran Premio de Arabia Saudita ha vivido una situación estremecedora en la primera sesión de entrenamientos libres en el circuito de Jeddah debido a que un misil cayó y explotó una de las instalaciones de Aramco, uno de los patrocinadores de la Fórmula 1, provocando un gran estruendo a pocos kilómetros del circuito urbano
Durante la pasada semana ya sucedió algo parecido en esta ciudad en virtud de un conflicto que mantiene el país con el vecino Yemen y a pesar de todo el contexto, los dirigentes de la Fórmula 1 no consideraron que el Gran Premio tenga que suspenderse.
En las redes sociales empezaron a circular videos de las llamas y el humo que procedía de la refinería del patrocinador de la categoría reina y según afirman algunas fuentes, estas bombas fueron arrojadas por los hutíes, un grupo insurgente de Yemen.
¿Qué pasará con el Gran Premio de Arabia Saudita?
Antes de la segunda tanda de entrenamientos libres, los jefes de las escuderías se reunieron con el patrón de la F1, Stefano Domenicali, para hablar de la situación, constató la AFP.
Hearing some drivers unsure about continuing with the weekend after the recent attack nearby #F1 #SaudiArabianGP pic.twitter.com/TmzUxBLpRo
— Chris Medland (@ChrisMedlandF1) March 25, 2022
"Les ha informado que el fin de semana se llevará a cabo como está previsto y que la seguridad del evento ha sido una prioridad para las autoridades antes de este incidente. Les tendrá al corriente de cualquier información nueva y seguramente volverá a reunirse con los jefes de equipo por la noche para trasladarles cualquier nueva noticia", precisó un portavoz de la F1.
La situación política en Arabia Saudita
Arabia Saudita lidera una coalición militar que lucha desde hace siete años contra este grupo rebelde y en apoyo del gobierno yemenita.
En varias ocasiones, los rebeldes hutíes han atacado instalaciones petroleras en un contexto en el que las potencias occidentales presionan a los países productores de petróleo para que aumenten la producción para contener los precios del crudo, que protagonizan una escalada desde la invasión lanzada por Rusia contra Ucrania hace un mes.