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Ante un seleccionado paraguayo que pasó de fase raspando y sin triunfos tras ir ganándole 3-1 faltando muy poco, Venezuela logró una memorable clasificación a los cuartos de final de la Copa América al empatar 3-3 ya en tiempo de descuento, gracias a un cabezazo de su arquero que permitió al defensor Perozo empujar la pelota a la red casi abajo del arco luego de un córner.
Con este resultado y el de Brasil y Ecuador puesto, la Vinotinto terminó segunda en el Grupo C y enfrentará a Chile el próximo domingo en San Juan a las 19.15 hs. Por su parte, Paraguay entró como segundo mejor tercero y se volverá a ver las caras con el la selección de Mano Menezes, también el domingo pero a las 16 hs. en el estadio Ciudad de La Plata.
En un estadio casi colmado, Paraguay arrancó el partido como para comerse crudo a su rival. A los 3 minutos, Roque Santa Cruz desbordó por derecha y en vez de habilitar a dos compañeros que entraban de frente por el medio del area, prefirió rematar al arco. Su disparo se fue dos metros por arriba del travesaño, pero dejó la sensación de que la Albirroja resolvería fácil el pleito.
Cuando nadie lo esperaba, sin embargo, y al cabo de un contragolpe que encontró a la defensa paraguaya totalmente desacomodada, Salomón Rondón sacó desde unos centímetros afuera del área un derechazo bajo que dejó a Justo Villar sin resistencia.
El gol venezolano enmudeció a la tribuna paraguaya, que hasta ese momento había copado el estadio. La ventaja acomodaba a Venezuela en el tope del grupo y dejaba a Paraguay afuera.
Mientras los dirigidos por el Tata Martino sentían el golpe, por largos minutos Venezuela equilibró el juego, cambiando cada ataque de su rival por un contragolpe que en casi todas las ocasiones hizo trastabillar a la defensa rival. No obstante, los guaraníes tuvieron una oportunidad de igualar con otro remate de Santa Cruz que cruzó el arco y se perdió cerca del palo derecho de Vega.
Luego, en una arriesgada salida fuera del área, el arquero venezolano dejó sin aliento a su parcialidad cuando paró la pelota con el pecho y luego la embolsó ante la arremetida de Marcelo Estigarribia.
Venezuela pudo aumentar a los 28, cuando Alexander Gonzalez, desde inmejorable posición desperidició la jugada rematando desviado. Pero a los 31 llegó el empate paraguayo tras un cabezazo de Lucas Barrios que superó la estirada de Vega y pareció que se había introducido en el arco. En medio de los reclamos continuó la jugada y tras un rechazo fallido de un defensor venezolano, Antolin Alcaraz, casi desde el punto del penal, sacó un derechazo que se introdujo en el arco superando un enjambre de piernas.
A partir de entonces y hasta el final de la etapa, los dos tuvieron sendas oportunidades para desnivelar, pero fallaron en la puntada final.
En el segundo tiempo, pasaron largos minutos sin que hubiera llegadas sobre los arcos. El juego se repartió en la mitad de la cancha, sin que hubiera primacía de uno sobre otro. Mas bien abundaron los errores y ambos parecian conformarse con un empate que los ponía en la siguiente ronda. Hasta que a los 18, a la salida de un córner por izquierda, Barrios tomó el balón al borde del área chica y sometió a Vega con un disparo a media altura.
El director técnico venezolano pretendió darle más produndiad al ataque haciendo ingresar a Giancarlo Maldonado y Fedor. Sin embargo, fue Paraguay el que aumentó la ventaja a través de Riveros, quien se adelantó a toda la defensa venezolana luego de un centro con pelota parada desde la derecha.
Los paraguayos pensaron que se irían disfrutando de una goleada, pero el ánimo venezolano no decayó y Fedor achicó las cifras. Entonado por el descuento, Venezuela se fue masivamente al ataque y generó un córner por la izquierda. El arquero Vega puso la nota al ir a cabecear. Y fue justamente el guardameta quien impulsó la pelota hacia la izquierda habilitando a Grenndy Perozo, quien la empujó dentro del arco.
Enseguida llegó el final y la conformidad para ambos por la clasificación obtenida. La Copa America habia pasado por Salta y dejó a los casi 20 mil espectadores mucho más que conformes con el espectaculo.
