El director de Selecciones Nacionales y ex entrenador campeón del Mundo en Argentina 1978, César Luis Menotti, falleció el domingo a la tarde, a los 85 años y su pérdida conmocionó a todo el mundo del fútbol argentino.
Desde chico le inculcaron el amor por Rosario Central. Nacido en la ciudad, su padre lo llevaba al Gigante de Arroyito. "Iba a la cancha desde que tenía 7 años, es el único lugar donde no me falla la memoria. Yo subía y bajaba por la tribuna, corría por el alambre", recordaba entre risas.
Tras hacer las inferiores en el Canalla y luego de un puñado de partidos en Reserva, fue subido a la Primera y debutó nada más y nada menos que contra Boca Juniors un 3 de julio de 1960 en un bautismo soñado: convirtió el tercer gol de la victoria por 3 a 1 ante el Xeneize.
Rápidamente se ganó un lugar en el ataque y en las tres temporadas siguientes fue el goleador del equipo; formó una recordada sociedad de juego con Miguel Antonio Gitano Juárez y Enrique Nene Fernández.
Anotó un total de 46 goles; entre los que más se recuerdan, en 1963 al futuro campeón Independiente en Avellaneda para derrotarlo 1-0 en la fecha 15 y de larga distancia a River Plate para ganar por el mismo marcador en la jornada siguiente. Luego, se marchó a Racing.
Tras un par de años afuera del club, retornó a Rosario Central en 1967, pero su segunda etapa por desentendimientos con el por entonces técnico, Miguel Ignomiriello, lo eyectaron rápidamente y solo jugo dos partidos para luego irse al Santos de Pelé.
A pesar de estar lejos de Rosario y de Arroyito, Menotti siempre sobrevolaba en el Gigante de Arroyito a tal punto de ser invitado a la despedida de otro emblema Canalla: Omar Negro Palma. El Tordo invitó al Flaco quien dirigió en conjunto al equipo con Don Ángel Tulio Zof, el técnico más ganador en la historia de Rosario Central, para que el talentosísimo enganche tenga su Last Dance en 1998.
Con Zof se enfrentaron en un partido válido por la decimocuarta fecha del Apertura 1996 en cancha de Central y al ser consultado por el retiro de Don Ángel, fiel a su estilo, el Flaco le expresó todo su cariño y aseguró: "Que se va a retirar, el nació acá, es de acá, es como yo, está es su casa. Se retirará del banquito pero seguirá aportandole a los jugadores. Él es patrimonio de Rosario Central".
Tras un largo periplo entre Selección Argentina, Barcelona, entre otros equipos grandes del fútbol argentino, los caminos de César Luis Menotti y Central se volvieron a encontrar en 2002. La Academia venía de flojas campañas en el plano local y el director técnico asumía las riendas del equipo auriazul de cara al Clausura de aquel año.
Tras conseguir resultados irregulares, propio de un entrenador que asume a mediados de un torneo por un plantel que no conformó, el verdadero Central de Menotti apareció en las primeras 6 fechas del Apertura 2002: ganó varios partidos por goleada y además rompió la racha de 22 años sin victorias en el Parque Independencia tras derrotar 2 a 0 a Newell's, el rival de toda su vida.
Pero lamentablemente para Central y Menotti, el nivel del equipo decayó a lo largo del torneo y tras una dura derrota como local ante Estudiantes de La Plata por 1-2 y tras 9 partidos sin victorias, el Flaco fue cesanteado de su puesto para ser reemplazado por Miguel Ángel Russo, quien realizó un campañón en el Clausura 2003 terminando en la cuarta posición.
"Central no puede jugar como el culo. No puede ganar de cualquier manera. Cuando la gente canta La Academia, La Academia... Eso no es casualidad. Ese canto tiene un sentido. Lo que no puede perder Central es el honor y la hidalguía", declaró allá por el 2015.
"Una vez jugué para Boca, pero abajo tenía la camiseta de Central, y metí un golazo de volea de zurda desde afuera del área y fui tapa de El Gráfico. Cuando uno se va de Central siempre debe tener la camiseta con la que jugó por primera vez en el club. Siempre me las llevé en los partidos más chivos como técnico", reveló
"El día que le ganamos a Newell's y cortamos la racha de más de 20 años en el Parque Independencia, me fui con la camiseta de Central abajo. Las camisetas que tengo de los jugadores que dirigí se las regalé a mi nieto, menos la de Central. Esa se la llevará cuando yo me muera", expresó César Luis Menotti, quien dejó un legado imborrable en el fútbol argentino y que siempre resaltó su amor por su querido Rosario Central.
Hasta siempre, Flaco. Sin dudas estarás alentando en la tercera tribuna del Gigante de Arroyito como un hincha más.
SP