Alberto Márcico y Carlos Navarro Montoya fueron dos grandes referentes del Boca campeón en 1992 de la mano del Maestro Tabárez pero luego de ese título muy festejado por romper la sequía de once años algo se rompió en el plantel y nació la famosa interna denominada "Halcones y Palomas", que casi 30 años después el Beto intenta minimizar aunque reconoce que pudo haber tenido algunas actitudes que la alimentaron.
“No existieron los Halcones y Palomas. Hubo dos jugadores del plantel que no lo querían al Mono Navarro Montoya y como yo era referente, me quisieron hacer enfrentar con él. En algún momento quizás entré en el juego, pero no, nos respetamos y hablamos", declaró en Radio del Plata en diálogo con Marcelo Benedetto, el futbolista que descubrió Carlos Timoteo Griguol y lo llevó a Ferro sin hacer inferiores.
#BOCA | Beto Márcico en @Comotevaok “Puede ser que juegue un poco el ego. Hay veces que te agradas como un bobo y crees que sos Dios. No es que sos Superman y que no te pega nada, pero hay de todo". https://t.co/snXpGDhFXG
— ¿Cómo te va? (@Comotevaok) May 26, 2020
Y agregó sobre el tema: “Puede ser que juegue un poco el ego. Hay veces que te agrandás como un bobo y creés que sos Dios. No es que sos Superman y que no te pega nada, pero hay de todo".
Para el Beto jugar en Boca era un sueño y tras su regreso de Francia lo pudo cumplir y así lo recuerda: “En el club viví las tres: fui hincha, futbolista y ayudante de campo con Tabárez, las tuve todas. En la época que era hincha, terminaba de jugar en la tercera de Ferro, me tomaba el 25 e iba a ver los partidos a la cancha de Boca. Antes no estaban las plateas y estábamos todos parados en la tribuna. Cuando entraba a la cancha o cuando tiraba un córner, decía: ‘Pensar que yo estaba ahí afuera parado en la tribuna’”.
Y sobre la supuesta interna y el mundo Boca comentó: “Por más personalidad que tengas, siempre tenés momento de flaqueza y de duda. Para mí, fueron muy pocos, pero en algún momento los tuve. En Boca, quizás en la época que se hablaba de Halcones y Palomas”.