Un grupo de barrabravas de Colón de Santa Fe irrumpieron en la práctica del plantel para pedir explicaciones por los malos resultados del equipo, además de pedir dinero e indumentaria a los jugadores, situación que generó la suspensión del entrenamiento Sabalero.
"Era un grupo de 30, más o menos y pidieron hablar con los referentes. Hubo un jugador que reaccionó y ahí empezaron las discusiones y empujones", afirmó un testigo, según informó el diario El Litoral.
Los jugadores que mayores reclamos recibieron fueron Paolo Goltz y Ramón Wanchope Ábila.
Según se precisó, la Policía intervino para que la situación no pase a mayores. Además, el plantel se asesoró con Futbolistas Argentinos Agremiados (FAA) y se determinó suspender la práctica de este miércoles a la mañana.
La misma determinación tomaría el plantel Sabalero en el entrenamiento del jueves si no reciben suficientes garantías.



