Mauro Zárate no tuvo un comienzo de año como lo él lo esperaba. Las lesiones le impidieron jugar, ser parte activa del Boca que terminaría arrebatándole la Superliga a River en la última fecha.
Mientras estuvo ausente, un rumor periodístico indicó que el atacante estaba peleado con el entrenador Xeneize, Miguel Ángel Russo. El ex Vélez y Lazio de Italia se ocupó de negar esa versión.
"No vale la pena aclarar boludeces. Siempre se va a tratar de armar quilombo en Boca. El año pasado era con Carlitos que no jugaba, que tenía mala cara y no sé cuantas boludeces más... Ahora, conmigo", dijo en una entrevista concedida a TyC Sports.
En ese sentido, agregó: "Estamos acostumbrados. En Venezuela iba a ser titular y volver de mi lesión, pero tuve esa molestia y 10 días después terminé lesionándome por querer estar. Fue un comienzo para el olvido, nunca tengo lesiones y sufrí tres seguidas".
Zárate, al igual que el resto de los jugadores de Boca, se entrena en su casa a la espera que se determine la reanudación de la Copa Superliga. Después del parate intentará devolver la confianza que la nueva dirigencia de Boca depositó en él.
"Hablé varias veces con Román (Riquelme). Tengo un poco de bronca porque no pude devolverle la confianza que tiene en mi en la cancha... Espero poder hacerlo cuando se vuelva a jugar", expresó.
AM
