Sin la atención puesta en el minuto a minuto, la radio se presta para conversar y contar historias de la vida personal como lo hizo Martín Liberman con sus compañeros de Liberman Online al revelar el dramático accidente doméstico que casi le cuesta la vida.
"Hoy me desperté 7.55, un desastre. Ayer casi me muero y quedé conmovido con la situación. Les juro que no es un chiste, estuve a 15 segundos de perder la vida. Me atoré, me asfixié, no podía respirar. Mi mujer me pegaba, yo me pegaba y ella trataba de hacerme la maniobra de atrás y no era suficiente hasta que en la desesperación me empecé a pegar el estómago contra la silla y pude expulsar el maní", sorprendió a todos Liberman en FM 94.7 cuando le preguntaron por qué había dormido mal.
El periodista, que realiza su programa de manera remota por la pandemia de coronavirus, continuó con su historia de sufrimiento que tuvo a su esposa como testigo y emergentóloga en una situación realmente desesperante para cualquier persona que no sea médica.
"No sé cuánto tiempo me quedaba, no podía respirar. No me pasaba el aire, me empecé a desesperar y estaba más rojo que de costumbre. Me las vi realmente muy fulera, pasé una noche espantosa y dormí muy poco. No es chiste, creo que me quedaban 15 o 20 segundos. No sé cuánto tiempo más podía estar así sin respirar", agregó Liberman todavía conmovido.
Una situación de este tipo le puede pasar a cualquiera y por ese motivo es tan importante que todos sepan lo mínimo e indispensable de primeros auxilios. De todas formas, Liberman aclaró que no hay moraleja en este caso: "No hay moraleja en este caso porque yo estaba tranquilo en mi casa sentado mirando el partido de Boca comiendo maní. Obviamente que nunca más en mi vida como maní y mucho menos con piel porque estoy seguro que fue eso lo que me quedó atragantado".
Y cerró con su habitual estilo para ponerle un poco de picante: "No saben cómo me duele la garganta, estoy golpeadísimo. Pero bueno, lo importante es que estoy acá. Hay algunos que hubieran festejado pero todavía falta, zafé. Les digo la verdad, en mis 46 años de vida es la vez que más cerca vi la muerte. Realmente pensé que me moría".