jueves 28 de marzo del 2024

Para D'Onofrio, Sampaoli no debió dirigir el Mundial

El presidente de River reclama un cambio profundo en el fútbol argentino y aseguró que más allá del proyecto deportivo hay que apuntar a los valores. Video.

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El año de River va llegando a su fin con la alegría histórica e imborrable de la obtención de la Copa Libertadores ante Boca pero también con el sinsabor de la derrota frente a Al Ain que le impidió disputar la ansiada final del Mundial de Clubes ante Real Madrid, aunque según las propias palabras del presidente Rodolfo D'Onofrio para nada opaca el logro conseguido en Madrid ante el clásico rival y el balance sigue siendo altamente positivo.

En una extensa entrevista con el programa Estudio Fútbol, D'Onofrio habló de todos los temas desde Abu Dhabi e hizo referencia al presente del fútbol argentino que lo encuentra a River lejos de la toma de decisiones.

"Yo no me entrego con el fútbol argentino. Le pusimos muchas ganas los dirigentes de River a ayudar a cambiar al fútbol argentino. Ahí no pudimos, no nos fue bien. No porque el proyecto sea malo o bueno, no lo compartimos en su momento y nos quedamos afuera. Nadie nos ha tratado mal por estar afuera pero no podemos aportarle al Comité Ejecutivo", explicó en diálogo con Gastón Recondo.

"Creo que está la voluntad del presidente de AFA y los clubes grandes que sí están al lado tienen que apoyar el cambio profundo que necesita el fútbol argentino, donde haya valores, donde vos no podés tener un técnico como el que tenía el seleccionado argentino que un día quiso coimear a un policía", opinó sobre el incidente que protagonizó Jorge Sampaoli en Casilda.

Y amplió su postura con ejemplos: "Ese mismo día hay que sacarlo, como hizo el presidente de la federación española cuando se enteró que Lopetegui negociaba con el Real Madrid, yo también lo hubiera sacado. Hay que tener conducta y no tengo nada contra él, se equivocó, fue un error pero el mensaje que le bajás a los jugadores es malo. Hay valores. Gallardo jamás hubiera hecho eso porque no es su moral, no es su ética, no es su conducta, no es su manera de ser, por eso los jugadores lo respetan, ven un líder que no solamente les dice cómo se juega sino también con valores, con proyectos".