Parece increíble, pero el pedido es real. Una iniciativa busca que el pole dancing, vulgarmente conocido como "baile del caño", sea aceptado como deporte olímpico. Ya demasiado cerca de los Juegos de Londres, el objetivo sería lograr la aprobación del Comité Olímpico Internacional para Río de Janeiro 2016.
Un grupo de abogados ya presentó una propuesta al COI con el fin de acceder a una suerte de "prueba" en Londres 2012 y, si todo resulta bien, estar cuatro años más tarde en los Juegos que se realizarán en Brasil, informó el diario español La Vanguardia. Por ahora, juntan firmas y esperan una resolución favorable.
"Es cuestión de tiempo que el pole dancing sea aceptado como deporte olímpico", dice la fundadora de la Asociación Internacional de Pole Dancing, Ania Przeplasko.
Pero esta disciplina, que requiere de grandes condiciones acrobáticas, enfrenta algunos escollos: su erotismo, su marcada sensualidad y la corriente asociación que existe con la actividad de los strippers.
En Argentina, más allá de la popularización a través del programa de Marcelo Tinelli, el pole dancing tiene muchas adeptas. De hecho, el fin de semana pasado se realizó en Buenos Aires el campeonato sudamericano de la especialidad, que quedó en manos de la peruana Elizabeth Muñoz, quien así se ganó el pasaje al Mundial de Budapest 2011. Viviana Morales se consagró a nivel nacional y también estará en el torneo internacional.
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