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En el choque de ida de las semifinales de la Champions League, Bayern Munich se hizo fuerte de local y derrotó por 2-1 al Real Madrid, que contó con las presencias de los argentinos Angel Di María y Gonzalo Hiaguaín.
A los 17 minutos, el Allianz Arena estalló gracias al gol de Frank Ribery, quien venció con un fuerte remate a Iker Casillas aprovechando un rebote dentro del área.
En el segundo tiempo, llegando a los ocho minutos iba a llegar la igualdad del Madrid y fue Mesut Özil el autor del tanto luego de una asistencia de Cristiano Ronaldo, que en primera instancia había definido mal ante Manuel Neuer.
Cuando el partido parecía encaminarse al empate pese a que el Bayern era superior, apareció Mario Gomez para sentenciar el partido a solo un minuto del final y para dejar abierta la revancha que será la semana próxima en el Santiago Bernabeu.
Para Mario Gómez se trata de su tanto número 12 en la actual edición de la Champions, donde sólo lo supera Lionel Messi, quien hasta el momento suma 14.
El resultado deja la batalla abierta, aunque el equipo de José Mourinho tendrá que salir a remontar en el duelo de vuelta del miércoles 25 en Madrid, si quiere volver a Múnich para la final del 19 de mayo.
"No es un resultado malo. Hay que remontar, pero tampoco necesitaremos una remontada histórica. Con 1-0, 2-0 o 3-1 vale. No será fácil, pero el equipo puedo hacerlo y además jugaremos en casa, con el apoyo de nuestra afición", apuntó Mourinho, aparentemente tranquilo.
"Hemos merecido la victoria. El Madrid comenzó bien, pero luego fuimos nosotros quienes tomamos el control", aseguró el técnico local, Jupp Heynckes.
En la otra semifinal, el Chelsea y el Barcelona de Messi y Javier Mascherano se miden este miércoles en la ida en Londres y la vuelta está programada para el martes 24.
