viernes 26 de abril del 2024

Barras: denuncian complicidad policial

Por su pasividad en el último superclásico, una ONG denunció penalmente a efectivos y altos jefes de la Federal. Además, pidió purificar la Fuerza.

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La ONG "Salvemos al Fútbol" denunció penalmente a efectivos de la Policía Federal y a su director de Operaciones, Guillermo Calviño, a raíz de los disturbios que se registraron en el último superclásico. Asimismo, pidió la "purificación" de la fuerza de seguridad federal por considerar que hay complicidades con los violentos de las barras bravas.

Según el vicepresidente de la ONG, el ex juez Mariano Bergés, en la presentación, que él mismo firmó y entregó ante la fiscalía de Núñez-Saavedra, "se denuncia a personal de la Policía Federal Argentina, y a los funcionarios jerárquicos de esa fuerza policial, toda vez que han cometido el delito de incumplimiento de los deberes de funcionario público".

Salvemos al Fútbol cuestionó el nuevo esquema de seguridad que viene implementando el Ministerio que conduce Nilda Garré porque busca "deslindar la responsabilidad de la policía en los eventos futbolísticos, trasladándola dentro de los estadios, a personal de seguridad privada".

En ese sentido, postula que "es la Policía la que debe velar por la seguridad de los ciudadanos y esto comprende también los adentros de un estadio de fútbol".

En el caso del partido entre River Plate y Boca Juniors del último 27 de octubre, según la denuncia la Policía Federal "no cumplió sus funciones como responsable del operativo de traslado de la hinchada xeneize desde el barrio porteño de La Boca hacia el estadio de River Plate (sede del encuentro)".

"Si bien se los acompañó en móviles policiales nada se ha hecho para evitar los actos de vandalismo (hacer pintadas en la vía pública, por ejemplo) ni se ha velado por la seguridad de los que se dirigían a Núñez (los colectivos superaban la capacidad permitida, estaban en pésimo estado, y muchas personas viajaban colgadas)", añade el texto.

Además, "no se ha realizado el correcto control de lo que se trasladaba, ni se chequeó a los que no portaban entrada. Por tal motivo, se han generado disturbios en los accesos, lo que permitió -además- el ingreso de mayor número de personas que las permitidas para dicha parcialidad".

Lo ocurrido en el superclásico "no debe quedar impune, porque los barrabravas, y sus compinches (directivos, policías), siguen haciendo de las suyas y salen airosos… Es visible tanto su vinculación, como su inoperancia y debe existir un cambio de rumbo", sostiene la presentación.

Fuente: DyN.