Racing lo perdió sobre la hora y Tigre festejó un agónico 2-1 en Avellaneda

Luego de la derrota ante Peñarol por la Copa Libertadores, Racing volvió a las canchas este viernes y volvió a perder: en el marco de la quinta jornada del Torneo Clausura, Tigre se llevó la victoria por un 2-1 agónico.

Desde el Estadio Presidente Perón, más conocido como el Cilindro de Avellaneda, los dirigidos por Gustavo Costas presentaron un equipo alternativo y fueron los de Diego Dabove quienes se terminaron llevando los tres puntos.

Sin dudas, no fue uno de los mejores partidos de La Academia: los locales no pudieron contrarrestar a los visitantes, mostraron inseguridad en los pases y poca eficacia en la defensa.

El gol de Racing llegó sobre los últimos minutos del primer tiempo: tras una carambola cerca del área visitante, Adrián Rocky Balboa la paró de pecho y remató con una volea aérea que se coló en el ángulo derecho del arquero Felipe Zenobio. Un tanto para enmarcar.

Ya en el segundo tiempo, el equipo dirigido por Diego Dabove empezó a tomar protagonismo ante un Racing que generaba dudas y que se terminó durmiendo en Avellaneda.

A falta de pocos minutos para que termine el partido, un agarrón dentro del área llevó al árbitro a sancionar un penal, que Braian Martínez transformó en gol.

Cuando todo parecía que iba a terminar en un empate, Tigre anotó el segundo sobre los últimos instantes: luego de una excelente jugada colectiva, la pelota le quedó en el área a Ignacio Russo, quien puso la cabeza y terminó estampando el 2-1 agónico en Avellaneda.

De esta manera, Racing quedó relegado a la decimotercera posición con cuatro puntos, mientras que Tigre se metió en zona de playoffs al escalar hasta la sexta posición con siete unidades.

FMZ