Anoche Boca pasó una enorme prueba derrotando a Racing en un clásico con fútbol de alto vuelo para seguir con aspiraciones de clasificarse a la siguiente instancia de la Copa de la liga.
De esta manera, ante semejante triunfo por 4-2 ante la Academia, una vez finalizado el partido Marcos Rojo, quien integró nuevamente el banco de suplentes tras varias semanas ausente por lesión, se abrazó con Diego Martínez demostrando que entre ambos nació una gran relación.
Sobre ese efusivo festejo fue que se refirió el entrenador del Xeneize: “Fue un abrazo hasta de agradecimiento. Es tan importante lo que nos transmite, es tan importante en el día a día”.
En esa misma línea Martínez se rindió a los pies del defensor asegurando que es un factor decisivo en el plantel. “Hacés un trabajo de tenencia y se tira de cabeza. Hacés un trabajo defensivo y está jugando la final del mundo. Él juega la final del mundo en cada momento que entrena. Nos gustaba tenerlo en la concentración y tenerlo en el banco. Es nuestro líder y capitán como lo son Sergio, Pol y Edi. Son los que marcan el camino hacia dónde queremos ir como equipo de fútbol”, añadió.
Respecto a la situación del ex defensor del Manchester United, en la victoria con Racing volvió a formar parte de los concentrados para un partido luego de casi dos meses alejado de las canchas por un desgarro en el gemelo derecho en la entrada en calor en un amistoso de pretemporada ante Gimnasia y Tiro de Salta.
Demostrando que dejó atrás su lesión, al defensor central se lo irá viendo sumar minutos en los próximos partidos con Estudiantes (LP) y Central Norte por Copa Argentina (si se confirma) según indicó Martínez quien sabe que sería vital recuperar a un jugador de ese calibre.
JP