miércoles 03 de julio del 2024
Declaraciones

El crudo testimonio de un ex Boca sobre su alcoholismo: “Perdí todo, estuve cerca de la muerte”

El mediocampista mundialista con Colombia profundizó su historia con las adicciones. “Estoy en el proceso de recuperar a mis tres hijos”, reveló.

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Unos años atrás sorprendió las fuertes declaraciones de Fredy Guarín sobre sus problemas para lidiar con las adicciones. El alcoholismo que casi se lleva por delante la vida del ex Boca, Inter de Milán y Selección de Colombia generó que el talentoso mediocampista se exponga como un ejemplo para aquellas personas que buscan ayuda ante esta clase de escenarios.

“Yo fui alcohólico social durante varios años; estando activo en el fútbol, vivía en un consumo. Ahí empezó mi proceder y a descargarme, por decirlo así, en tomar malas decisiones. Cuando salgo de Millonarios fue el punto más profundo que toqué, porque durante estos últimos tres años caí en el fondo de mi adicción. Había perdido mi dignidad, mi círculo social cercano, la confianza de seres queridos y de lo más importante y valioso que yo tengo, que son mis tres hijos. Perdí muchas cosas de valor sentimental, amoroso. Llegó un punto en que ya no podía más seguir de esa forma. Me tocó pedir ayuda, ya lo había hecho varias veces, pero había recaído. Me tocó rendirme y entregarme a mi ser superior, a unos profesionales con los que estoy trabajando y poder remediar muchas cosas. Recuperar la confianza tanto mía como la de mis hijos, la de mis familiares. No podía solo y me dejé ayudar. Estoy en ese proceso. Con toda seguridad lo puedo decir: este es el definitivo. Ya le toqué la puerta al diablo y no es lo mejor”, sostuvo en diálogo con el medio colombiano Semana.

Perdí mi matrimonio, perdí mi hogar, mi familia. Me duele mucho haber perdido ese hogar, porque es un hogar que yo construí desde el inicio, de la nada. Ella (Andreilla, su primera esposa) fue una gran compañera, excelente mamá y me queda aceptar, perdonarme y desearle lo mejor en su vida. Que siga siendo esa excelente madre que es y desearle lo mejor, bendiciones y que un día también ella pueda perdonarme. Al final somos dos padres que desean lo mejor para sus hijos. Quiero poder tener una relación buena, basada en el respeto. Con Sara Uribe me di otra oportunidad, en un nuevo hogar y no funcionaron las cosas. Ella me enseñó mucho y la respeto, valoro todo lo que hizo para poder construir un hogar bonito, sano. Tomé malas decisiones por el alcohol. No estaba en la misma sintonía. Tal vez son cosas que se tenían que vivir y también desearle lo mejor a ella. Es una gran madre con Jacobo, que es un amor de Dios, y ahí están los valores que ella tiene y que le ha mostrado en sus cinco años de vida a nuestro hijo”.

Estuve cerca de la muerte porque no tuve respeto, no tuve límites, no tuve valor y me fui dejando llevar cada día más a ese hueco. Toqué las puertas del infierno. Ya sé lo que es eso y no quiero volver nunca más en mi vida. Hoy estoy feliz, no me cambio por nada en el mundo. Estoy viviendo el día a día. Con muchas ganas de poder vivir una vida normal, tranquila, proyectada. Plenamente en paz y con muchas ganas de poder vivir la vida de una persona normal, una persona que se levanta, entrena, trabaja, llega en la noche a la casa y descansa”, se esperanzó.

Por otro lado, el colombiano hizo referencia al vacío luego de su carrera como futbolista, algo que varios protagonistas aseguraron que resulta ser una etapa compleja y que en este caso potenció su adicción: “Cuando yo me retiro del fútbol y más de la forma como me retiré, que no fue algo adecuado, quedé con esa sensación de 'qué hago ahora', 'qué me pongo a hacer'. Lo mío fue durante 20 años entregarme al fútbol y es lo que yo sé hacer. No me preparé para otras cosas. Quedé como desamparado y tomé decisiones que no fueron buenas. Me tocó aprender. Vuelvo atrás para recordar lo malo que hice, impulsarme para adelante y seguir llevando la mejor vida”.

Por último, Guarín concluyó: “Puedo decir que mis padres estuvieron, están y estarán ahí para mí como hijo. Estuvieron en las peores, en la perversión de su hijo. Siempre estuvieron con amor, por ese lado me siento feliz, contento. Pronto les voy a dar un abrazo, decirles que los amo y agradecerles por todo. Estoy en el proceso de recuperar a mis tres hijos. Están en su espacio. Yo respeto mucho también las decisiones que hayan tomado. A mis hijos los amo y estuve pagando por un tiempo. Ya sé cuál no es el camino y que el camino es Dios que me fortalece cada día y una vida sobria, sana, para poderles dar todo limpio y un amor infinito que tengo con mis hijos”.

El paso de Guarín por Boca

El talentoso mediocampista ofensivo desembarcó en el Xeneize en 2006 para integrar las juveniles del club llegando proveniente del Atlético Huila del fútbol colombiano. Su debut en la primera del conjunto de La Ribera se dio el 1 de febrero de ese año de la mano de Alfio Basile, DT en aquel entonces.

En su breve paso por Boca, Guarín disputó un Superclásico ante River.

Sin embargo, su paso por Boca fue fugaz ya que solo disputó cinco partidos, tres amistosos ante River, Racing y San Lorenzo, y dos de manera oficial ante Rosario Central y el Ciclón. Asimismo, Guarín formó parte del plantel campeón del Apertura 2006 y de la Recopa Sudamericana de ese año ante San Pablo.

Luego de esa breve estadía en el Xeneize, el nacido en Puerto Boyacá pegó el salto al fútbol europeo llegando al Saint-Etienne del fútbol de Francia. Seguido de ello tuvo pasos por el Inter, Porto en el Viejo Continente.

Tras ese paso por el fútbol de primer nivel desembarcó en el Shanghai Shenhua, Vasco da Gama y Millonarios donde finalmente se retiró de la práctica profesional. Además representó a su país en la Copa del Mundo de Brasil 2014 y la Copa América 2011 y 2015.

JP

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