Cuando Rusia invadió Ucrania, Gerónimo Poblete se encontraba en Turquía realizando la pretemporada con el Metalist, club al que se sumó hace poco tiempo y con el cual todavía no debutó, pero su esposa y sus hijos se quedaron en Jarkov, una de las ciudades más castigadas por los rusos, y fueron alojados en un hotel de refugio.
Pero luego de largos días de preocupación y angustia, llegó la calma para Poblete, ya que su familia logró escapar de Ucrania y pudo llegar a Rumania vía Moldavia. El futbolista, había lanzado un pedido desesperado a las autoridades argentinas para que pudieran ayudar a su esposa e hijos a salir de la ciudad, uno de los objetivos más bombardeados por los militares comandados por Vladimir Putin.
"Estoy en Turquía con el equipo y debíamos regresar el día 24 a Jarkov. Fue la mañana de la invasión a Ucrania y nos cancelaron el vuelo obviamente. Quedé en Turquía y mi familia allá. Hablo minuto a minuto, no puedo salir del teléfono", contó el volante.
El Ministro de Turismo y Deportes, Matías Lammens, le facilitó al jugador el contacto de la embajadora Elena Leticia Mikusinksi, con quien se contactó de inmediato para obtener colaboración y una solución. Afortunadamente, con el paso de las horas, la ayuda llegó y su familia logró ser rescatada de la zona de guerra.