El Inter de Miami ya dio el gran paso: contratar a nada más y nada menos que Lionel Messi. Ahora la intención del club de David Beckham será rodear al argentino con rostros conocidos para que su estadía en el fútbol de Estados Unidos sea lo más placentera posible.
Claro está, porque el propio Messi lo demostró, si está cómodo en el ambiente que le toca afrontar como jugador, los resultados caen por decantación. De esta manera, uno de los principales apuntados por el Inter de Miami es Luis Suárez, excompañero del Barcelona e íntimo amigo del rosarino.
Pese a esas intenciones de traer a Suárez para rodear a Lionel Messi en su aventura en la MLS, el uruguayo fue categórico sobre la posibilidad de salir de Gremio de Porto Alegre, club al que arribó para esta temporada y con el que firmó un contrato por dos temporadas.
El centrodelantero que supo brillar en el Barcelona junto al capitán de la Selección Argentina y con quién forjó una gran amistad junto con Neymar, despejó la posibilidad de cambiar de equipo en el corto plazo: "Es imposible. Estoy muy feliz en Gremio y tengo contrato hasta fines de 2024".
Además, el club de Porto Alegre no tiene ninguna intención de desprenderse de su jugador franquicia. El uruguayo ya ganó dos títulos en el Tricolor (Recopa Gaúcha y Copa de Brasil), anotó 14 goles y dio ocho asistencias en 25 partidos.
De esta manera, con la negativa de Suárez, en principio, el club de David Beckham buscará cerrar fichajes estelares para rodear a Messi y, por ello, sondeó en los últimos días a Sergio Busquets y Jordi Alba, quienes compartieron tiempos de gloria con el rosarino en Barcelona y salieron del equipo catalán al finalizar esta temporada.
Además, cada vez tiene más chances de ser el nuevo entrenador del equipo el argentino Gerardo Tata Martino, quien tuvo un último paso por la selección de México, y cuenta con una destacada trayectoria, en la que dirigió a Messi en Barcelona y el seleccionado argentino.