En un accidentado y polémico clásico del Merseyside por la incidencia del VAR, Liverpool debió conformarse con un empate 2-2 ante el Everton, que sigue como líder de la Premier League tras cinco fechas.
Al equipo de Jürgen Klopp le anularon el gol del triunfo en tiempo de descuento por una discutida posición adelantada de Sadio Mané cuando Jordan Henderson anotaba el 3-2. Tras la intervención del VAR, el árbitro terminó anulando la conquista.
El senegalés Sadio Mané (3) y el egipcio Mohamed Salah (72) marcaron los goles del campeón inglés, mientras que Michael Keane (19) y Dominic Calvert-Lewin (81) anotaron para Everton, que lidera la competencia con 13 puntos, tres más que el Liverpool.
Con este trabajado empate, que tiene lugar después de cuatro triunfos en sus primeros cuatro partidos, el equipo del italiano Carlo Ancelotti demostró que su liderato en la Premier no es casualidad.
Tras encajar un bochornoso 7-2 en la anterior jornada frente al Aston Villa (3º), los Reds suman su segundo partido sin conocer la victoria, y aún no sabe si podrá contar próximamente con su estelar defensor holandés Virgil van Dijk, que se retiró lesionado a los 11 minutos tras una fuerte entrada del arquero Jordan Pickford.
La patada de Pickford a Van Dijk
