El partido postergado de la Superliga entre Rosario Central y River dejó varios condimentos para destacar: las numerosas situaciones de gol que generaron los dos equipos, el zapatazo de Juanfer Quintero, los insultos a Javier Pinola y la invasión de cancha de una mujer semidesnuda con la excusa de dar un mensaje de paz en el fútbol.
La señorita que sorprendió a todos en el Gigante de Arroyito se llama Sheila Stanolli, tiene 28 años, es fanática de Rosario Central y se define -según da cuenta su perfil de Instagram- como una apocalíptica, cristiana y seguidora de la luz.
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Transcurrían ocho minutos del segundo tiempo cuando Stanolli burló la seguridad y se infiltró en el campo de juego con el torso desnudo y pintado con los colores de Central y Newell's en cada mitad. En su parte trasera se pintó los de Boca y River. Tras algunos minutos de persecución, fue detenida por la policía.
Sheila no tenía nada para esconder, se pintó su nombre en la panza para que fuera identificada, se puso la bombacha de su equipo, Rosario Central, y escribió la frase "no a la violencia". ¿Habrá sido ese su verdadero fin o sólo busca fama en los medios?


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