El nombre de Roberto Trotta estará por siempre entre los más importantes y ganadores de la historia de Vélez pero después de lograr todo junto a aquel recordado equipo que dirigía Carlos Bianchi, su relación con el hincha se quebró y más de 20 años después parece no tener vuelta atrás.
"Yo me equivoqué y dije en caliente una pavada que no tendría que haber dicho pero pedí disculpas miles de veces, ya está. Yo no estaba enojado pero ahora sí lo estoy porque Vélez es campeón del mundo gracias a nosotros y se olvidaron", contó Trotta en una extensa y picante entrevista con Federico Bulos en su canal de YouTube.
Trotta había tratado de "amargos" a los hinchas de Vélez y tiempo después volvió al José Amalfitani con la camiseta de River y fue a patearle un penal nada más y nada menos que a José Luis Chilavert ante el intenso griterío y hostigamiento de toda la gente que lo había tenido poco tiempo atrás como capitán, ídolo y referente de los logros más significativos de la historia del club.
No sólo convirtió Trotta sino que lo hizo con una hermosa vaselina y lo gritó con bronca de cara a la popular de Vélez: "Si vos mirás todos los goles que hice en mi carrera, los grité siempre. Yo era un profesional, el fútbol para mí era un trabajo, no una pasión", explica en la actualidad. Y agregó: "Entendí que era la mejor forma de hacerle un gol de penal al mejor arquero que yo conocía".
Y siguió: "Nosotros perdíamos 1-0 y el gol de Vélez lo hago yo en contra. Desde la popular de Vélez, que fue donde yo pateé el penal, automáticamente cuando voy a patear me empezaron a gritar 'Trotta sos cagón'. ¿Cómo puede ser que esta gente que le levanté todas las copas importantes que tienen me digan cagón? Que poca memoria y que feo tener a tu capitán que haya sido un cagón. Por eso yo creo que lo grité un poco más".
De todas formas, más allá de ser igual o más picante al declarar que cuando jugaba, Trotta reconoció: "Si me hubieran dicho que si no lo gritaba yo iba a estar bien con la gente de Vélez, quizá no lo gritaba pero no puedo volver atrás".
El ex defensor de 52 años reveló que más allá de esta relación tirante con los hinchas de Vélez lo invitaron al agasajo para festejar el aniversario de la Copa Intercontinental pero creyó que lo mejor para todos era no ir e incluso soltó: "No pienso ir nunca más a la cancha de Vélez".
Más allá de toda esta historia que lo enemistó con los hinchas de Vélez, Trotta asegura estar totalmente agradecido al club de Liniers: "Representa en mi carrera deportiva, en logros y en juego, lo mejor que me pasó. No puedo decir otra cosa, para mí Vélez en lo deportivo fue algo muy bueno y en lo personal como jugador de fútbol algo excelente porque fue donde toqué el techo y por eso estoy totalmente agradecido".