viernes 26 de abril del 2024

La obra la escribe Grondona

Como otras veces, se ampara en el Comité Ejecutivo. Pero él decidió echar a Batista.

442

El email que le llegó a los clubes es meramente formal: “La reunión del Comité Ejecutivo se adelanta para el lunes a las 17, en Ezeiza”. Julio Grondona mandó a decir sin decir. Que Sergio Batista ya no será el entrenador de la Selección argentina es una verdad tan elocuente como que la instalación mediática del tema fue teledirigida desde Viamonte 1366. Hay quienes señalan al entorno del presidente de AFA como el que montó el escenario para desbancar al técnico. Verdad, a medias. “El Viejo los dejó que hablaran”, la asegura en off a PERFIL un integrante de la Comisión de Selecciones.

Grondona, esta vez, no quiso asumir enteramente la decisión. A Germán Lerche, por ejemplo, le atendió el teléfono y le escuchó el vómito de críticas sobre Batista. Después, el presidente de Colón hizo pública su postura, aunque con un lenguaje edulcorado. A Batista, en tanto, lo afectaron los dichos de la prensa. Pero mucho más, el silencio de Grondona, que unos días antes lo había tranquilizado sobre su continuidad. El lunes será el día F, el de las formalidades. El director general de Selecciones no moverá un dedo por Batista. Tampoco Humbertito. Y sin ellos de su lado, el DT sabe que está en la calle.

Con suerte, algunos dirigentes escucharán oficialmente los candidatos a suceder a Checho. Pueden ser Alejandro Sabella y Gerardo Martino, ambos con cláusulas de rescisión en sus contratos. El ex técnico de Estudiantes –que el lunes viajará a Dubai, donde dirigirá al ignoto Al Jazeera– es la carta de Carlos Bilardo, el hombre al que, por ahora, las balas lo rozan, pero jamás lo hieren. ¿Y Carlos Bianchi? Es un posibilidad remota, que sólo tiene cierto asidero si Bilardo no fuese parte de la Selección. Mauro, el hijo del Virrey, declaró ayer: “Mi papá no tendría problemas de hablar con Grondona”.

Vamos a volver. La AFA tiene guionistas tan obvios que repiten fechas, modus operandi y el manto impoluto del todo pasa que pone a salvo cualquier cabeza, menos la de los entrenadores. Por un capricho cronológico, Karl Marx nunca supo del fútbol argentino. Sin embargo, dijo lo que le cabe justo al último tramo de los ciclos de Diego Maradona y Batista al frente de la Selección: “Hegel dice en alguna parte que todos los grandes hechos y personajes de la historia universal aparecen, como si dijéramos, dos veces. Pero se olvidó de agregar: una vez como tragedia y otra vez, como farsa.” Se repasa. Hace un año, Maradona era empujado del cargo, previo a un amistoso. Desde su temperamento explosivo, reveló: “Bilardo y Humberto (Grondona, hijo de Julio) hicieron la lista para Irlanda. Era un tocuen (cuento) que la armé yo. Fueron ellos”.

Batista estaba anotando nombres para enfrentar a Rumania cuando el rumor de su salida le estalló en los oídos. Otra vez, la Selección deberá afrontar su primer compromiso post eliminación (en la era anterior había sido tras la derrota contra Alemania en Sudáfrica 2010), con un entrenador interino. La lista deberá presentarse el martes, para el (impostergable) amistoso que se jugará el 10 de agosto. Bilardo y Humbertito ya pueden ir pensando el borrador.

Chau, Checho. Un dirigente de peso en AFA no se maneja con eufemismos. “Batista no tiene culo y espalda para bancarse este fracaso”, opina ante este medio. Es el mismo que asegura que Grondona no lo llamó a él para desactivar la bomba mediática, justamente porque era lo que quería provocar. Además, justificó la reciente firma de contrato del entrenador: “Estábamos convencidos de que Argentina llegaba a la final”.

Cuidadoso de las formas, Grondona recibirá a su amigo Joseph Blatter para ver la final entre Uruguay y Paraguay, con Batista todavía en su lugar. Con frialdad de cirujano, decidió que el corte fuera después de la Copa. Después, el presidente de AFA viajará a Río de Janeiro por una reunión del COI. Con la conciencia tranquila.

El reino del revés. Bilardo ayer estuvo media hora reunido con Grondona, pero dice no haber hablado sobre la continuidad de Batista. En tanto, los dirigentes que propusieron a Batista, hoy fogonean su salida. Al contrario, Lanús y Vélez, clubes que cuestionaron esa elección por falta de proyecto, abogan por su continuidad. No se trata de convicción, sino de garantizar procesos.

“Me llamaron para apagar un incendio, lo apagamos y después sucede esto que pasó en las últimas horas. Grondona me mintió y Bilardo me traicionó.” La frase lleva la firma de Maradona; podría suscribirla Batista.

(*) Esta nota fue publicada en la Edición Impresa del Diario Perfil