Cuatro días después de haber sido atacado por barras bravas, el defensor Jonathan Bottinelli volvió hoy al Nuevo Gasómetro para entrenar junto a sus compañeros, aunque aún es una incógnita si estará ante Olimpo ya que tras el apriete el jugador habría decidido no jugar más en el club.
Bottinelli, quien terminó con un ojo morado por uno de los golpes que recibió el miércoles último, regresó a las prácticas tras tomarse tres días de descanso en Mar del Plata y entrenó como si nada hubiera ocurrido.
En el sitio web oficial de San Lorenzo se señala que "Bottinelli se sumó al grupo, que ya piensa en el encuentro de este viernes a las 21.15 frente a Olimpo en Bahía Blanca", con lo que de algún modo se sugiere que el defensor agredido jugaría ese partido.
El ataque a Bottinelli derivó en reuniones entre el titular de Futbolistas Argentinos Agremiados (FAA), Sergio Marchi, y el encargado de la seguridad en el fútbol a nivel nacional, Juan Carlos Blanco, que definió a favor de la suspensión del partido entre San Lorenzo y All Boys que debía jugarse hoy domingo.
Marchi, quien jugó en San Lorenzo en la década del 80, estuvo hoy en el entrenamiento acompañando a Bottinelli. Por su parte, uno de los asesores de fútbol en el club, Héctor Veira, abrazó al jugador ni bien llegó al club. "Se va a recuperar rápidamente porque es un chico muy fuerte mentalmente", vaticinó Veira.
San Lorenzo volverá a entrenarse este lunes desde las 9.
Fuente: DyN.
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