Micael Favre, el futbolista de 24 años procedente del club San Jorge de Villa Elisa, que falleció el domingo en el partido ante Defensores de Colón por la liga entrerriana murió por una afección cardíaca y no por el golpe recibido en su cabeza, según la autopsia.
El fiscal entrerriano Juan Sebastián Blanc, a cargo de la causa, le confirmó al sitio Toda Pasión que Favre tenía un problema cardíaco preexistente. De todas maneras, en la fiscalía se esperan los resultados completos de la autopsia para los próximos días.
El futbolista había recibido un rodillazo en la cabeza tras un choque con un defensor rival, logró reincorporarse y volvió a caerse. Minutos más tarde, sufrió una descompensación y falleció camino al hospital.
La médica que lo atendió, Isabel Garay, contó que Favre llegó muerto al hospital y que no pudieron reanimarlo.