Es el partido más feo que te puede tocar jugar: por el tercer puesto. Casi que algunos preferirían ser eliminados dignamente. Pero bueno, había que jugarlo y allí estuvieron los muchachos de Lionel Scaloni,
La selección arrancó de menor a mayor en esta copa, sufrió un despojo del que mis compañeros y la AFA se ocuparon como corresponde, y terminó jugando contra Chile, enfrentamiento que se puso picante en los últimos años. Y podríamos decir que los trasandinos salieron a ver qué pasaba y se acordaron de intentar atacar cuando Argentina ya ganaba dos a cero.
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Chile no tenía ganas de jugar el partido, y no sabía cómo hacer. La más clara confirmación de esto, fue la insólita triple agresión de Medel a Messi y que en el patético reglamento imaginario del "antifútbol" está escrito así: "ya que no sé jugar, me llevo al mejor de ellos". El impresentable árbitro Mario Díaz de Vivar y el impresentable VAR no entendieron que a lo sumo, hubiera sido amarilla para Messi y roja para Medel. Pero árbitro y VAR se sacaron el problema de encima y rajaron a los dos.
Una lástima, muchachos. Antes los partidos podían desnaturalizarse por los malos arbitrajes. Ahora, se desnaturalizan por los errores de la tan mentada "tecnología".
En el juego, Argentina fue superior porque supo lo que quería y lo fue a buscar. Lo consiguió rápido, y luego bajó la intensidad. Se perdió un poco con la expulsión de Messi, más por la impotencia ante esa injusticia que por no saber qué hacer en la cancha. Eso lo perdió.
Poco pasó en el segundo tiempo. Fue bastante parecido al final del primer tiempo, con la selección argentina buscando algún espacio para meter el tercero, y Chile buscando sin ideas un descuento, más por inercia que por convicción. Y en una jugada sucia, que no entrañaba demasiado peligro, y con la ayuda del VAR, llegó el penal para Chile y ese descuento, que parecía que no llegaría nunca a esa altura del partido.
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Franco Armani. Espectador de lujo en el primer tiempo, apenas cortó algún centro o controló un tirito chileno. Nada que hacer en el penal, tuvo una linda atajada un minuto después de equivocarse en un rechazo.
Juan Marcos Foyth. se le escapó cuando arg trataba de salir jugando. Bien controlando su posición. Tuvo más aciertos en las salidas que errores.
Guido Pezzella. Buenas salida de la selección, no tuco mucho trabajo en defensa y la jugó bien cuando la recuperó.
Nicolás Otamendi. Como Armani, tuvo poco trabajo, las pocas que le llegaron las jugó con inteligencia.
Nicolás Tagliafico. Otro que cortó las pocas que intentó Chile.
Rodrigo De Paul. Buenos cortes, bien en la presión recuperando la pelota, buenas asociaciones con Lío de mitad de cancha para adelante.
Leandro Paredes, preciso en los pases, bien distribuyendo el juego. Fue protagonista de una linda jugada junto a Agüero que terminó en un tiro libre, que ejecutó él mismo ejecutó pero pegó en la barrera y en el rebote, la tiró muy lejos.
Giovanni Lo Celso. Exquisito pase 'a lo Messi' para poner el segundo de Argentina. Bien en lli
Lionel Messi. La primera pelota que tocó fue a los 6 minutos y terminó con foul. En le segunda que tomó, también lo foulearon y como en el primer tiro libre, habilitó a Agüero, para poner el 1 a 0. Sufrió una insólita expulsión cuando cualquier otro se hubiera tirado al piso ante el mínimo roce buscando que expulsen al rival. Fue muy bueno lo que hizo mientras estuvo en cancha.
Sergio Agüero. Presión. fue el primero que intentó pegarle de media distancia. Se fue cerca del palo. La segunda que tocó, le marcó el pase a Lío, que se le dio justa, eludió al arquero y golazo. 1 a 0. Bien bajando a recuperar la pelota, comprometido con el juego en su mejor partido en la copa América, salió faltando 10, cansado y cuando Scaloni apuntó a controlar más la pelota que a intentar el tercero. Demostró que todavía va a dar pelea en la Selección.
Paulo Dybala. En la primera aproximación seria, picó habilitado en un pase de Lo Celso y se la picó al arquero para poner el segundo (y segundo golazo) a los 21 minutos del primer tiempo. Comprometido con el equipo, lúcido para atacar, no dudó en bajar a defender cuando la selección ganaba por dos. Insólitamente, a Scaloni se le ocurrió que Di María podía ... bueno, no sé qué le habrá pasado por la cabeza. La carita de Pablo Aimar parecía la misma que todos los argentinos que miramos el partido...
Angel Di María. Cuando todos lo daban fuera de la Selección, Scaloni le dio una insólita oportunidad más, ¡¡¡Por Dybala!!! que estaba jugando un gran partido. Hizo un jugadón que terminó dejando a Agüero solo frente al arquero aunque el pase no fue milimétrico y el Kun definió con el Uno de Chile encima, que pudo taparle el remate.
Matias Suárez. Estuvo poco tiempo en la cancha, casi no participó del juego, apenas un par de faltas cuando le revolearon la pelota para ver si resolvía algo.
Ramiro Funes Mori. Scaloni miró el partido al revés. Cuando Argentina tenía todo para hacer el tercero, hizo cambios para más para provocar que para esperar los ataques de un rival que casi no había atacado. Así metió a Funes Mori, para defender. Tuvo una, se la dio a Armani haciendo transpirar a todos.