De los mejores jugadores que haya dado sin duda alguna el fútbol argentino en toda su historia, el miércoles 19 de junio de 1974, el nombre del argentino René Orlando Houseman ocupó los titulares de los principales diarios del mundo gracias al golazo que le convirtió a Italia en el Mundial de Alemania.
El partido, correspondiente a la segunda fecha de la primera fase del Grupo D terminó igualado 1-1. El zurdazo espectacular del Loco, a los 19, ponía arriba a los entonces dirigidos por Vladislao Cap, mientras que, a los 35 minutos, Roberto Perfumo, en contra, igualaba para el combinado italiano, poniéndole cifras definitiva al encuentro.
Tras una gran habilitación de Babington, el máximo ídolo de Huracán dejó en el camino a Fabio Capello y después de anticiparse al “stopper” Tarcisio Burgnich, definió con un exquisito remate de zurda por arriba del legendario arquero italiano Dino Zoff, para marcar un gol de antología en la historia de los Mundiales.
Ese golazo, y el gran rendimiento que tuvo durante su debut mundialista le hizo ganarse el respeto y admiración de sus rivales. Tanto que, una vez finalizado el certamen, el holandés Johan Cruyff confesó que el argentino había sido uno de los mejores jugadores del torneo.
Con tres goles, -también le convirtió a Alemania y a Hatí-, Houseman terminó en el Top Ten de los máximos goleadores del Mundial de Alemania 74: convirtió uno menos que el célebre alemán Gerd Müller y los mismos que monstruos de la talla del holandés Johan Cruyff, el brasileño Rivelino y del polaco Kazimierz Deyna.
LR
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