La novela terminó. Juan Román Riquelme firmará en estas horas su nuevo contrato con Boca Juniors por cuatro temporadas más y jugará en el club de sus amores hasta los 36 años.
Riquelme ama a Boca, de eso no hay dudas. Cuando estaba en las Inferiores de Argentinos Juniors pudo pasar a River Plate y su representante habló con Pedro Pompilio para decirle que Román era de hincha de Boca, que no quería ser millonario. Todos sabemos el final: Román compartió con Maradona el Boca de Bilardo. Pero el fútbol es profesional y se juega por plata.
Hagamos un repaso rápido. A fines del 2006 Boca perdió el tricampeonato con Ricardo La Volpe como DT ante Estudiantes. Esa misma noche, Mauricio Macri decidió contratar a Miguel Ángel Russo como nuevo entrenador e invertir 2 millones de dólares por un préstamo de seis meses de Riquelme, colgado en el Villarreal de Pellegrini y Roig.
Sí, el mismo Jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires que hoy dice que el número 10 es un líder negativo, cuando necesitó al ídolo lo usó también. Negocio redondo: Román jugó como nunca y Boca ganó la Copa Libertadores de América 2007 de manera brillante en Porto Alegre frente al Gremio. Tan bien jugaba ese equipo que Sebastián Battaglia era suplente.
En el segundo semestre del 2007, Riquelme tuvo que volver a ver fútbol desde la platea del Madrigal, el estadio del Submarino Amarillo. Viajó al Mundial de Clubes en Japón pero no pudo ser habilitado. El Milán de Carlo Ancelotti le metió 4 a Boca en la final del mundo y terminó el ciclo de Miguelito.
Boca tenía nuevo presidente: el recordado Pedro Pompilio. El flamante mandatario apostó fuerte y se lo compró al Villarreal por una suma aproximada de 16 millones de dólares. Román tenía un contrato de 18 meses y regalaba un año, en el que cobraba cerca de 8.500 euros mensuales.
En esos 30 meses, Boca le ganó la Recopa a Arsenal y obtuvo el Apertura 2009 en el triangular con San Lorenzo y Tigre, pero en los últimos 18, con Basile, Bianchi manager y Alves, sólo ganó clásicos. El nuevo contrato por el que Ameal y Angelici casi se agarran a trompadas el jueves pasado en la Bombonera le saldrá a Boca Juniors una cifra que ronda los siete millones de dólares más el partido despedida para Riquelme.
Román se hizo presente en la reunión del viernes en un hotel céntrico para decirle en la cara al presidente Amor que le había prometido cuatro años de contrato y no dos temporadas. Ameal quiere ser presidente ganando las elecciones del 2011, entonces le dio el gusto al ídolo, sin dudas el hombre con más poder en La Boca por estos tiempos.
Sacando cuentas, la etapa Riquelme 2007-2014 a Boca le costará cerca de 25 millones de dólares. Si es caro o barato lo dirán los resultados de estos próximos cuatro años. Lo que está claro es que Riquelme juega por amor a la camiseta y también por plata.
