La final de la Copa América entre Brasil y Perú dio un giro inesperado a 20 minutos del cierre con la expulsión de Gabriel Jesus, en una acción dividida con Zambrano, en la que el árbitro chileno Roberto Tobar le mostró la segunda amarilla después de haber sido amonestado a los 30 minutos.
Tite, entrenador de la Verdeamarela, movió su banco y envió a Richarlison por un desgastado Firmino y sacó a Coutinho por el defensor Éder Militao. Así resistió con dientes apretados las embestidas desordenadas de Perú.
Pero Brasil siguió generando peligro a pesar del hombre menos, y en la última acción de ataque que tuvo en el partido marcó el 3-1 con un penal ejecutado por Richarlison tras falta de Zambrano sobre Everton.
La jugada, al igual que la previa al 1-1, fue advertida por el VAR y revisada por el árbitro, quien ratificó su decisión. ¿Fue penal?
Así ganó Brasil su novena Copa América. Sin derrotas, con apenas un gol recibido en seis partidos y arropado por una 'torcida' que volvió a festejar con el 'jogo' de la Canarinha.
CV y agencia AFP