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En un primer tiempo en el que Boca estuvo dormido, lento y sin ese poder ofensivo que lo llevó a un comienzo demoledor en este 2015, al término del primer tiempo se vivió una situación habitual del fútbol, aunque extraña por la forma en que se dio.
Cuando los jugadores de ambos equipos se dirigían rumbo a los camarines, Agustín Orion le recriminó alguna situación concreta del partido de manera ampulosa a Leandro Marín, que se fue escuchando los retos del capitán y parece que las palabras le hicieron efecto porque finalmente anotó el primer gol de la noche para que Boca cierre la zona de grupos con puntaje perfecto.
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