Un sábado cargado de emociones se vivió en el estadio Gabino Sosa del club Central Córdoba de Rosario, donde miles de personas se acercaron a despedir a Tomás Felipe Trinche Carlovich con aplausos, lágrimas y un fuerte reclamo de justicia para el ex futbolista muerto tras un episodio de inseguridad.
Los restos del ex jugador llegaron alrededor de las 10 de la mañana al estadio del club donde brilló el Trinche. Allí se le rindió un homenaje al mítico futbolista que murió el pasado viernes luego de ser salvajemente golpeado por un ladrón que le robó la bicicleta y ahora descansarán en el cementerio de Granadero Baigorria, Santa Fe.
La ceremonia fue breve pero intensa en emociones y en sostener el firme reclamo por justicia para que las autoridades puedan dar con el responsable del crimen de Carlovich.
Para darle el último adiós al ídolo la comisión directiva de Central Córdoba de Rosario permitió el acceso de socios y de público en general a las gradas de la cancha del barrio Tablada.
Una multitud le puso color y emoción a la despedida del Trinche y la gran mayoría de las personas tenía colocado barbijo o tapa boca, aunque no se respetó el distanciamiento social que se impone en la cuarentena por el coronavirus.
El coche que trasladó los restos de Carlovich ingresó al Gabino Sosa poco después de las 10:30 y se ubicó de frente a la tribuna principal, donde solía ubicarse el ídolo charrúa para ver al equipo de sus amores.
El vehículo ingresó al campo de juego y fue recibido con una cerrada ovación y aplausos que se prolongaron por más de diez minutos, tras lo cual familiares y amigos del Trinche extrajeron el féretro y lo ubicaron muy cerca del medio del campo. Allí lo cubrieron con una bandera de Central Córdoba para luego trasladarlo a lo largo del perímetro de la cancha y así recibir el afecto de los simpatizantes.
Fuente: NA
FH
