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Sebastian Vettel (Red Bull) empezó dominando la temporada 2011 de Fórmula 1 con una victoria en el Gran Premio de Australia, por delante de Lewis Hamilton (McLaren, 2º) y Vitaly Petrov (Lotus Renault, 3º), mientras que Fernando Alonso (Ferrari) se quedó rozando el podio (4º).
El vigente campeón del mundo alemán, que en el pasado había tenido que abandonar tres veces el circuito de Albert Park, rompió finalmente la 'maldición' australiana y ganó la carrera dominando claramente a sus rivales.
"Para ser sincero no me gusta que se hable de 'dominio' en este momento. Todavía queda mucho, tenemos que mantener los pies en el suelo", dijo Vettel tras la victoria.
Por su parte, el español Fernando Alonso, con Ferrari, terminó cuarto, seguido por el australiano Mark Webber, quinto con el segundo Red Bull, mientras que el británico Jenson Button (McLaren) acabó en sexto lugar.
La sorpresa y la decepción del día la protagonizó el mexicano Sergio Checo Pérez, que logró terminar séptimo en su estreno en Fórmula 1 pero luego fue descalificado porque su Sauber incumplía el reglamento técnico.
Exceptuando algunas vueltas en las que Hamilton se puso primero, Vettel estuvo toda la carrera a la cabeza y llegó a la meta con 22 segundos menos que su rival británico.
Hamilton, ganador del Mundial en 2008, logró el segundo lugar gracias al buen funcionamiento de su McLaren, resultado del trabajo intenso de la escudería para mejorar el MP4-26 (modelo 2011), un coche que en la pretemporada tuvo muchos problemas pero está mejorando paulatinamente.
El ruso Vitaly Petrov logró un merecido tercer lugar tras una temporada 2010 sin brillo gracias a un buen arranque el domingo en Albert Park, lo que le lleva al podio por primera vez en su carrera.
El venezolano Pastor Maldonado, que también se estrenaba en F1 con Williams, tuvo por su parte que abandonar la carrera por un problema mecánico.
"No sabemos exactamente qué pasó con el coche, tendremos que verlo con los ingenieros. No hubo aviso, sólo nos detuvimos y se terminó ahí", dijo el pollo de Hugo Chávez.
Otra de las perdedoras de la jornada fue la escudería Mercedes, con sus dos pilotos, los alemanes Nico Rosberg y Michael Schumacher, obligados a abandonar en mitad de la carrera.
"El arranque de temporada no fue como esperábamos. Vamos a olvidar esta carrera y vamos a concentrarnos en la próxima en Malasia. Estoy disgustado por nuestros chicos aquí y en el taller, que trabajaron muy duro durante todo el invierno", dijo el siete veces campeón del mundo.
Fuente: AFP
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