sábado 04 de mayo del 2024

En Nigeria hubo goles "cantados"

Al adicionar ocho minutos e inventar dos penales en la caída por 4-1 de Argentina, el réferi Chaibou habría buscado beneficiar a apostadores.

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La Selección argentina perdió 4-1 contra Nigeria y, nadie lo duda, fue un espanto. Lo que no está tan claro es cómo calificar al árbitro Ibrahim Chaibou, de Níger. Si es por sus fallos deportivos, el réferi fue otro grotesco. Pero si su objetivo era satisfacer a los apostadores que necesitaban un quinto gol en los últimos minutos del partido, de cualquiera de los dos equipos, lo suyo fue muy efectivo.

“Es obligatorio sospechar que el árbitro tenía plata prometida para facilitar un quinto gol”, le explicó a NOTICIAS desde Inglaterra un gambler, un apostador profesional que sigue el movimiento en las casas de Asia y Europa (en el mercado on line de la Argentina el partido casi no registró interés). “En estos casos hay que ver los precios de los últimos 10 minutos, y un foro de apostadores de Dinamarca (www.betexpert.com) advirtió que un gol pasó a pagarse muy poco a 5 minutos del final, 1,5 por cada uno apostado. O sea, el dinero del árbitro se hizo apostando Over 4.5 sobre el final”, asegura la fuente.

“Over 4,5” significa más de cuatro goles. En claro: a una red de apostadores (que por lo general se afincan en Asia) le convenía un 5-0 o un 4-1. Chaibou cumplió el deseo: con el partido 4-0, el réferi adicionó 8 minutos e inventó un penal que le permitió a la Argentina convertir su único tanto. “Si el total de goles era menos de 5, el árbitro no recaudaba. O algo peor”, interpreta otro apostador, desde España.

Por supuesto, Chaibou no salió a la cancha decidido a convalidar cinco goles sí o sí, pero es muy probable que haya tenido la información previa de un grupo de opciones favorables. “Las apuestas de un partido se fraccionan en muchas variables. Por ejemplo, cantidad de córners, de penales, de goles y resultado exacto”, explica, en la Argentina, el gerente de una casa de apuestas. Los dos penales imaginados por el árbitro habilitan una duda adicional.

Absurdo. Se sabe que Chaibou, que no adicionó ni un segundo en el primer tiempo, extendió el segundo capítulo ocho minutos e inventó el penal que le permitió descontar a la Argentina. Lo que no trascendió fue que, a medida que el partido se alargaba de manera artificial, el mercado on line de algunas partes del mundo mostraba cifras inquietantes. El ejemplo más sospechoso fue que, cuando faltaban cinco minutos, un quinto gol, hecho por cualquier equipo, empezó a pagar muy poco, sólo 1,5, como si existiese un 70% de posibilidades reales.

Era extraño: en esa instancia ya agónica de cada partido, lo normal es que las chances de que haya un gol no superen el 20%. Pero según advirtieron apostadores daneses, algunas casas –para mantener rentable su negocio– bajaron la cuota porque desconfiaron de la gran cantidad de hinchas que empezaron a jugar su dinero a la espera del quinto tanto. “Ese árbitro es fix”, se dijo también en un foro chileno. “Fix” es arreglo.

La FIFA suele tardar en investigar a estos árbitros, pero en marzo jugó fuerte y despidió a Lengyel Kolos, un húngaro sospechado en una maniobra similar. La salida de Chaibou debería pagar poco.

(*): Nota publicada en la edición impresa de la revista Noticias.