Saltaron algunos hinchas de Independiente como saltaban en las tribunas en otros tiempos, cuando de la mano de don José Epelboim ganaban Libertadores como ahora agruras: una atrás de la otra. Saltaron mal, según me cuentan, por la columna titulada ‘La feria de vanidades de Avellaneda es mayor que La Salada’.
El correo del zar. Pasan los Siglos y el hombre no cambia. Conserva en su interior la fiera voraz que ataca por instinto y sinrazón. Conocidas son las historias de la Rusia, imperial y guerrera, donde los zares hacían matar a los carteros que traían malas noticias, como si fuesen los responsables de ellas. Hoy se intenta eliminar al periodista que no cuenta aquello que se desea escuchar. Es increíble como aún existen minorías devastadas de sus estímulos ‘gustativos’, aún en quienes decían tener ‘paladar negro’. Minorías que prefieren deglutir una mentira dulce antes que masticar una verdad amarga. Bien gritaba aquella pintada callejera que mal recuerdo de la época de los militares: “En un mundo de mentiras, decir la verdad es un acto revolucionario”.
Público Rojo vs. público Albiceleste. Por ejemplo, en la citada columna, explicando la mayor cantidad de electores activos que tuvo Independiente sobre Racing, en la elección del fin de semana pasado, dije textualmente: “Independiente tiene muchísimos asociados más con residencia en Avellaneda, por su actividad social (aunque lleve menos gente a la cancha), lo que abrevia y facilita el camino a las urnas para los votantes”, me cuentan que no faltaron los ‘rojos’ que descargaron su artillería pesada contra este articulista. Los hinchas de Independiente no aceptan eso de ‘llevar menos gente a la cancha’...
Esta disputa es centenaria. En definitiva lo que Racing e Independiente discuten desde hace décadas es quien –cuantitativamente– es el tercer club argentino, atrás de Boca y River. Aunque alguna encuesta en cierto momento dio mejor a los ‘Rojos’ y alguna otra al mismísimo San Lorenzo (depende de los años en que se efectúan esas mediciones), la verdad es que en los números ‘vivos’, siempre aparece Racing como tercer club.
Huelgan las palabras; la estadística que muestra la cantidad de público pagante habla por uno. Lamentablemente el hincha que no abona su ticket no es contabilizado y, por lo tanto, si no se lo excluye del recuento se cae en la subjetividad del ‘ojímetro’.
En el Apertura 11/12 recién finalizado, según los números oficiales de la AFA, Racing en 9 partidos llevó muchísima más gente a su estadio Presidente Perón que Independiente en 10 partidos al Libertadores de América. Casi 20 mil personas más con un partido menos es significativo. Esto pese a esa mayor cantidad de socios que los ‘Rojos’ tienen en la ciudad de Avellaneda, donde están localizadas ambas canchas:
Apertura 2011 Generales Jubil.P.D. Menores Total Popul. Plateas Total
RACING.CLUB local 26.596 4.610 3.998 35.204 20.236 55.440
INDEPENDIENTE local 25.519 1.085 2.538 29.142 6.164 35.309
Otro número interesante que confirma la superioridad ‘académica’ en este ítem, es la totalidad de entradas vendidas, por uno y otro club, durante el año en que ambos fueron campeones por última vez (apenas 365 dias separan una vuelta olímpica de la otra).
Racing, en el Apertura 2001, fue campeón y vendió 323.102 ingresos. Independiente, en el Apertura 2002, fue campeón y vendió 291.433 entradas. Más de 25 mil ingresos a favor de los blanquicelestes.
Más datos. Veamos las cifras, de la propia AFA, reuniendo tickets totales –visitante y local– de los últimos 7 torneos (cuatro temporadas). El saldo vuelve a favorecer a Racing en 53.581 espectadores, no es poco: equivale a medio certamen.
TORNEO INDEP’TE. RACING DIFERENCIA A FAVOR DE…
08/09 (Ap.) 112.263 142.414 …Racing Club de 30.151 espectadores
08/09 (Cl.) 102.900 148.478 …Racing Club de 45.578 entradas
09/10 (Ap.) 138.071 112.462 …Independiente de 25.609 boletos
09/10 (Cl.) 121.739 98.007 …Independiente de 23.732 pagantes
10/11 (Ap.) 95.786 113.009 …Racing Club de 17.223 tickets
10/11 (Cl.) 93.578 112.391 …Racing Club de 18.813 ingresos
11/12 (Ap.) 92.912 84.069 …Independiente de 8.843 hinchas
Por último y haciendo un poco más de historia, sumados los primeros 26 torneos cortos (1991-2004), Racing supera a Independiente por 274.861 boletos vendidos; algo equivalente a si la Academia hubiese jugado un campeonato más que los famosos ‘Diablos’. Nada de esto es opinión. Son números concretos y oficiales; es la estadística (rendición de cuentas) auditada en AFA.
De cualquier modo, lo que debiesen discutir Racing e Independiente no es quien es más grande sino quien es mejor. Lo cuantitativo no garante lo cualitativo, mientras que la calidad puede ser un gran impulso para aumentar la cantidad de hinchas en general y de socios en particular. Vélez, por ejemplo, tiene menos hinchas que ambos clubes de Avellaneda, sin embargo es mejor club. Su calidad institucional se equipara a la calidad de su fútbol. No es casualidad que la entidad de Liniers gane más títulos que sus rivales allende el Riachuelo.
Troika. También hubo reclamos por el ejemplo ofrecido, en la polémica columna, sobre la forma de gobierno de San Marino, cuando hablé de la unidad que debería perseguir la dirigencia ‘Roja’ como camino más corto para salvar al club. El reclamo se posó en la poca jerarquía de la pequeña república sanmarinense y en el gran desconocimiento de ese territorio por parte de la gente común. Bien, como supongo que la mayoría conoce a la Unión Europea y algo sabe de ella, especialmente en estos tiempos de crisis (más o menos como la de Independiente) en que aparece a diario en los noticieros, sustituyo el ejemplo por la ‘troika’ de la UE. La ‘troika’ es el triunvirato que maneja las relaciones exteriores de esa unión de países, y la componen el Presidente del Consejo Europeo Permanente, el Presidente de la Comisión específica y el Alto Representante de la Unión para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad. Si las relaciones externas de la Europa más poderosa pueden ser manejadas por un triunvirato, pienso que Independiente también.
Descenso directo. También dije en esa columna –textualmente–, que “después de julio de 2012, el equipo que hoy dirige Ramón Díaz (…) probablemente juegue en descenso directo. Cuando se le vayan los 68 puntos de la temporada 09/10 estará peor que San Lorenzo (si los de Boedo no descendieron antes)”. Francotiradores ‘rojos’ respondieron con munición gruesa. No aceptan la posibilidad de que su equipo llegue a tan delicada posición y tratan a esa posibilidad real como si fuese un invento periodístico.
Veamos entonces el panorama con la tabla en la mano. Invierno 2012 –algo hay que suponer–. Todos los clubes sumaron, en el primer semestre, igual cantidad de puntos; en ese caso, la carrera por los descensos de la temporada 12/13, será exactamente la que sigue abajo (ya borrándose los puntos de la temporada 09/10 donde Independiente acapara suculentas 68 unidades).
Paso 1: eliminar a los dos clubes que descenderán en forma directa el 24 de junio próximo, tras el Apertura que comienza el 10 de febrero. El par de equipos que están últimos en este momento son Tigre y Olimpo. Pero, por la tendencia que puede trazarse a través de la última campaña de ambos –ya que jugaran con los mismos planteles el Clausura decisivo–, se salvaría Tigre (sumó 27 pts.), que iría a la Promoción. Pero caerá Olimpo (sumó 16 pts.). El otro descenso directo sería, entonces, para San Lorenzo (sumó 19 pts.). Por tanto se eliminan de la tabla de promedios que comenzará la temporada 12/13 a Olimpo y San Lorenzo, descendidos en forma directa.
Paso 2: Ahora, vayamos a la Promoción y no seamos catastróficos; no imaginemos que los dos clubes que llegan del Nacional ‘B’ derrotan a los dos de la ‘A’, como ocurrió este año. Pensemos que apenas uno de ellos sube. Por tanto, para la ‘A’, habría sólo un descenso más. En esa Promoción los que están en este momento son All Boys y San Lorenzo; pero San Lorenzo –ya fue explicado– por puntaje y última tendencia, caerá directamente: en su lugar ingresa Tigre. All Boys (sumó 21 pts.) también se salvaría y su plaza en la Promoción la ocuparía Newell’s, de mal promedio y pésima tendencia (sumó 16 pts.). Tigre y Newell’s juegan la Promoción. Uno se queda en Primera el otro viaja a la ‘B’. Por ejemplo, Tigre se mantiene y Newell’s desciende.
Resumen: con este escenario, estaríamos eliminando de la tabla de promedios 12/13 a tres equipos: Olimpo, San Lorenzo y Newell’s, los rebajados. En su lugar ascenderán tres clubes del Nacional ‘B’ sin promedio y –como este año Belgrano, Rafaela, San Martin de San Juan y Unión- con el beneficio de no dividir sus puntos…
Explicado el hipotético escenario esta es la tabla con la que comenzará, en agosto, el fútbol de Primera División en Argentina:
Equipos 10/11 11/12 Total Pts. Part. Jug. Promedios
Vélez Sarsfield 82 31 113 57 1,982
Boca Juniors 53 43 96 57 1,684
Belgrano de Córdoba 00 31 31 19 1,631
Lanús 63 29 92 57 1,614
Estudiantes de La Plata 69 20 89 57 1,561
Godoy Cruz de Mendoza 63 24 87 57 1,526
Racing Club 52 31 83 57 1,456
Arsenal de Sarandí 57 24 81 57 1,421
San Martin de San Juan 00 26 26 19 1,368
Colón de Santa Fe 47 31 78 57 1,368
Atlético Rafaela 00 26 26 19 1,368
Tigre 50 27 77 57 1,350
Argentinos Jrs. 54 22 76 57 1,333
Unión de Santa Fe 00 25 25 19 1,315
All Boys 51 21 72 57 1,263
INDEPENDIENTE 43 27 70 57 1,228
Banfield 47 11 58 57 1,017
Observando esta tabla no hacen falta más palabras; aunque claro, el escenario puede ser otro: Independiente gana todos los partidos del próximo Clausura, es campeón y se salva. Y cualquier otro equipo, hoy mejor clasificado, los pierde todos y cae. Estamos haciendo futurología con la imprecisión del fútbol, pero la realidad no es tan distinta a la descripta. Por ejemplo, Vélez no descendería ni siquiera perdiendo los 19 partidos del próximo Clausura. Entonces… estimados ‘rojos’, el diagnóstico es realmente de terapia intensiva: pueden ir, sí, a descenso directo. Y el correo del zar, garanto, no tiene la culpa de ello.
Aviso a los enojados hinchas de Independiente: tres décadas atrás, cuando decíamos que San Lorenzo podía descender, los periodistas éramos pájaros de mal agüero. Después, cuando –entre escombros– hablábamos del derrumbe de Racing con parada final en la ‘B,’ los escribas estábamos comprados. El año pasado, cuando comunicábamos el mal presentimiento que generaba el River de Jota Jota, en su camino a los sábados, éramos tira-bombas… San Lorenzo, Racing y River se fueron nomás al descenso. Es bueno que los hinchas de Independiente que critican al instalador de semáforos, apenas porque en algún momento se enciende el stop que les cierra el paso, despierten de su siesta y ayuden al club.
Ley de Murphy. Escribí, hablando de Julio Comparada: “El presidente que en la última década hizo (casi) todo mal aunque en su primer esbozo dirigencial, ayudó como colaborador, para que Andrés Ducatenzeiler en el inicio de su mandato, cuando amanecía el Siglo, le hiciera dar la vuelta olímpica al club cuyo equipo armaba el empresario de rock (…)”.
Al corregir el apellido Ducatenzeiler, que había escrito con ‘ll’, el mouse se llevó junto con la ‘l’ sobrante toda la línea que está en negrita. La frase que apareció publicada, entonces, dice textualmente: “El presidente que en la última década hizo (casi) todo mal aunque en su primer mandato, cuando amanecía el Siglo, le hiciera dar la vuelta olímpica al club cuyo equipo armaba el empresario de rock (…)”.
Por lo que, es cierto, no quedó clara la idea de la vuelta olímpica del 2002. Pareció que Comparada era el presidente en ejercicio en esa epopeya, cuando en realidad y desde afuera, enviado por Julio Grondona, era quien empezaba a manejar el fútbol del vice –interino en la presidencia– Roberto Galano (asumió un año antes al renunciar Pedro Iso). Comparada actuaba junto al incipiente fondo inversor de Grinbank (así se escribe: ¡gracias!) y al propio Ducatenzeiler que, como él, sin cargo directivo alguno, participaba en el día a día de una institución donde se hablaba de quiebra e intervención.
Comparada, en la elección del 2002, pensaba encabezar la fórmula de la Lista Roja con Noray Nakis, pero a última hora le dejó su lugar a Walter Mallo. Se bajó para actuar junto a Ducatenzeiler en el área fútbol (Independiente, por primera vez en la historia, había sido último en el torneo anterior). Tanto es así que en el 2004, cuando se lanza el ‘Plan Centenario’, asume oficialmente la Subcomisión de Fútbol. A esa altura Grinbank ya se había llevado ‘sus’ jugadores campeones tras haberse peleado con Ducatenzeiler –que después llegó a internarse en una clínica neuropsiquiátrica porque la situación del club le afectó su sistema nervioso–.
Así las cosas ese título del 2002 tuvo cuatro ‘dueños’ en la dirigencia: Galano (Agrupación Juventud Independiente, desprendimiento de la Lista Roja), Ducatenzeiler (Agrupación Gente de Independiente, continuidad de otra escisión de la Lista Roja inicialmente llamada Alianza Juventud Independiente), Grinbank (fondo inversor) y Comparada (en ese momento con un pie en la Lista Roja de su ‘padrino’ Grondona y otro en Nueva Generación Roja que estaba fundando).
De todos ellos Galano fue el más campeón en el 2002 porque Independiente se consagró como tal el domingo 1 de diciembre, al derrotar 3 a 0 a San Lorenzo, fecha 19, siendo que las elecciones que erigieron presidente a Andrés Ducatenzeiler ocurrieron el 24 de noviembre de ese año. Apenas una semana antes…
El torneo empezó con Galano presidente y terminó con Ducatenzeiler electo como tal. Galano fue presidente oficial en 18 partidos de ese Apertura. Ducatenzeiler sólo en uno y sin haber asumido, apenas como elegido. De todos modos Ducatenzeiler era quien manejaba el club y Comparada, al igual que Grinbank, movían los hilos del fútbol. Por eso, a la hora de adjudicarle méritos a Comparada, ya que construyó muy pocos en sus dos gestiones, no oculto su actuación en ese último título rojo, aunque no tuviera la visibilidad de los otros.
Y colorín, colorado (nunca más apropiado).
COLUMNA CONTADA: Esta vez reemplazo a la tradicional ‘Columna cantada’ por uno de los 51 cuentos del conde Lucanor (conocido popularmente como ‘La fábula del rey desnudo’), escrito en 1837 por el danés Hans Christian Andersen. Y, diferente de las habituales canciones adaptadas, aquí no hay ninguna alteración. Porque este cuento, en su versión completa, define el carácter de los hinchas de Independiente que no quieren ver al REY DE COPAS DESNUDO y, contra quien escribe que ‘está sin ropas’, gritan como el lobo aúlla a la luna...
Lo que sucedió a un rey con los burladores que hicieron el paño
Otra vez le dijo el Conde Lucanor a su consejero Patronio:
-Patronio, un hombre me ha propuesto un asunto muy importante, que será muy provechoso para mí; pero me pide que no lo sepa ninguna persona, por mucha confianza que yo tenga en ella, y tanto me encarece el secreto que afirma que puedo perder mi hacienda y mi vida, si se lo descubro a alguien. Como yo sé que por vuestro claro entendimiento ninguno os propondría algo que fuera engaño o burla, os ruego que me digáis vuestra opinión sobre este asunto.
-Señor Conde Lucanor -dijo Patronio-, para que sepáis lo que más os conviene hacer en este negocio, me gustaría contaros lo que sucedió a un rey moro con tres pícaros granujas que llegaron a palacio.
Y el conde le preguntó lo que había pasado.
-Señor conde -dijo Patronio-, tres pícaros fueron a palacio y dijeron al rey que eran excelentes tejedores, y le contaron cómo su mayor habilidad era hacer un paño que sólo podían ver aquellos que eran hijos de quienes todos creían su padre, pero que dicha tela nunca podría ser vista por quienes no fueran hijos de quien pasaba por padre suyo.
»Esto le pareció muy bien al rey, pues por aquel medio sabría quiénes eran hijos verdaderos de sus padres y quiénes no, para, de esta manera, quedarse él con sus bienes, porque los moros no heredan a sus padres si no son verdaderamente sus hijos. Con esta intención, les mandó dar una sala grande para que hiciesen aquella tela.
»Los pícaros pidieron al rey que les mandase encerrar en aquel salón hasta que terminaran su labor y, de esta manera, se vería que no había engaño en cuanto proponían. Esto también agradó mucho al rey, que les dio oro, y plata, y seda, y cuanto fue necesario para tejer la tela. Y después quedaron encerrados en aquel salón.
»Ellos montaron sus telares y simulaban estar muchas horas tejiendo. Pasados varios días, fue uno de ellos a decir al rey que ya habían empezado la tela y que era muy hermosa; también le explicó con qué figuras y labores la estaban haciendo, y le pidió que fuese a verla él solo, sin compañía de ningún consejero. Al rey le agradó mucho todo esto.
»El rey, para hacer la prueba antes en otra persona, envió a un criado suyo, sin pedirle que le dijera la verdad. Cuando el servidor vio a los tejedores y les oyó comentar entre ellos las virtudes de la tela, no se atrevió a decir que no la veía. Y así, cuando volvió a palacio, dijo al rey que la había visto. El rey mandó después a otro servidor, que afamó también haber visto la tela.
»Cuando todos los enviados del rey le aseguraron haber visto el paño, el rey fue a verlo. Entró en la sala y vio a los falsos tejedores hacer como si trabajasen, mientras le decían: «Mirad esta labor. ¿Os place esta historia? Mirad el dibujo y apreciad la variedad de los colores». Y aunque los tres se mostraban de acuerdo en lo que decían, la verdad es que no habían tejido tela alguna. Cuando el rey los vio tejer y decir cómo era la tela, que otros ya habían visto, se tuvo por muerto, pues pensó que él no la veía porque no era hijo del rey, su padre, y por eso no podía ver el paño, y temió que, si lo decía, perdería el reino. Obligado por ese temor, alabó mucho la tela y aprendió muy bien todos los detalles que los tejedores le habían mostrado. Cuando volvió a palacio, comentó a sus cortesanos las excelencias y primores de aquella tela y les explicó los dibujos e historias que había en ella, pero les ocultó todas sus sospechas.
»A los pocos días, y para que viera la tela, el rey envió a su gobernador, al que le había contado las excelencias y maravillas que tenía el paño. Llegó el gobernador y vio a los pícaros tejer y explicar las figuras y labores que tenía la tela, pero, como él no las veía, y recordaba que el rey las había visto, juzgó no ser hijo de quien creía su padre y pensó que, si alguien lo supiese, perdería honra y cargos. Con este temor, alabó mucho la tela, tanto o más que el propio rey.
»Cuando el gobernador le dijo al rey que había visto la tela y le alabó todos sus detalles y excelencias, el monarca se sintió muy desdichado, pues ya no le cabía duda de que no era hijo del rey a quien había sucedido en el trono. Por este motivo, comenzó a alabar la calidad y belleza de la tela y la destreza de aquellos que la habían tejido.
»Al día siguiente envió el rey a su valido, y le ocurrió lo mismo. ¿Qué más os diré? De esta manera, y por temor a la deshonra, fueron engañados el rey y todos sus vasallos, pues ninguno osaba decir que no veía la tela.
»Así siguió este asunto hasta que llegaron las fiestas mayores y pidieron al rey que vistiese aquellos paños para la ocasión. Los tres pícaros trajeron la tela envuelta en una sábana de lino, hicieron como si la desenvolviesen y, después, preguntaron al rey qué clase de vestidura deseaba. El rey les indicó el traje que quería. Ellos le tomaron medidas y, después, hicieron como si cortasen la tela y la estuvieran cosiendo.
»Cuando llegó el día de la fiesta, los tejedores le trajeron al rey la tela cortada y cosida, haciéndole creer que lo vestían y le alisaban los pliegues. Al terminar, el rey pensó que ya estaba vestido, sin atreverse a decir que él no veía la tela.
»Y vestido de esta forma, es decir, totalmente desnudo, montó a caballo para recorrer la ciudad; por suerte, era verano y el rey no padeció el frío.
»Todas las gentes lo vieron desnudo y, como sabían que el que no viera la tela era por no ser hijo de su padre, creyendo cada uno que, aunque él no la veía, los demás sí, por miedo a perder la honra, permanecieron callados y ninguno se atrevió a descubrir aquel secreto. Pero un negro, palafrenero del rey, que no tenía honra que perder, se acercó al rey y le dijo: «Señor, a mí me da lo mismo que me tengáis por hijo de mi padre o de otro cualquiera, y por eso os digo que o yo soy ciego, o vais desnudo».
»El rey comenzó a insultarlo, diciendo que, como él no era hijo de su padre, no podía ver la tela.
»Al decir esto el negro, otro que lo oyó dijo lo mismo, y así lo fueron diciendo hasta que el rey y todos los demás perdieron el miedo a reconocer que era la verdad; y así comprendieron el engaño que los pícaros les habían hecho. Y cuando fueron a buscarlos, no los encontraron, pues se habían ido con lo que habían estafado al rey gracias a este engaño.
»Así, vos, señor Conde Lucanor, como aquel hombre os pide que ninguna persona de vuestra confianza sepa lo que os propone, estad seguro de que piensa engañaros, pues debéis comprender que no tiene motivos para buscar vuestro provecho, ya que apenas os conoce, mientras que, quienes han vivido con vos, siempre procurarán serviros y favoreceros.
El conde pensó que era un buen consejo, lo siguió y le fue muy bien.
(*) Director Asociado Diario Perfil/primera época; creador de SoloFútbol.
