Desde la AFA dicen que "será la herramienta principal con la colaboración de los organismos de Seguridad para erradicar la violencia en el fútbol". Así, al menos, lo calificó Miguel Silva, secretario de la entidad y vice de Arsenal. Algunos dirigentes, en cambio, dudan. Y, como el presidente de Belgrano, Armando Pérez, se atajan diciendo que "es una decisión del Estado" acabar con los barras.
Lo cierto es que, más allá de un muy buen negocio para algunos, el sistema "AFA Plus" presentado este último miércoles en el edificio de la AFA representará efectivamente la posibilidad de realizar un mejor control de quienes asistan a cada partido, al establecer la obligación de empadronarse y presentar un carnet en el que estarán cargados los datos personales para entrar a los estadios.
Ahora bien, ¿terminará esto por sí solo con la presencia de las barras bravas en las tribunas y las actividades que realizan para recaudar dinero, al punto de ser hoy casi verdaderas PyMES ilegales? Imposible. Precisamente por lo que señaló el presidente de Belgrano y sugirió también el titular de Newell's, Guillermo Lorente, al decir que "acá el aporte político es muy importante".
Ocurre que el sistema, que bien usado podría ser "muy útil" como lo calificó Julio Baldomar (vicepresidente de Vélez), no ataca realmente a la violencia organizada en el fútbol. Es decir, no apunta a la connivencia que los barras mantienen con dirigentes de clubes, políticos y representantes de las fuerzas de seguridad, ni por ende a sus privilegios a la hora de ir o entrar a un estadio.
Acaso sí se logre recortar su campo de acción, al disponer el plan que las entradas -que serán virtuales y personales en vez de impresas y genéricas- no sean vendidas por los clubes ni en los estadios sino en puntos de venta administrados por la propia AFA, que estarán disponibles tanto físicamente como en la web.
Así, como dijo Diego Turnes (vicepresidente de River), "no existirán las entradas falsificadas, habrá un derecho de admisión automático y mayor recaudación" ya que -según anticipó el presidente de Lanús y secretario de Torneos de la AFA, Nicolás Russo- prácticamente no existirán las entradas "de protocolo" que suelen usar los barras. Aunque esto, claro, habrá que verlo.
Tampoco servirán de mucho por sí solos los nuevos molinetes que cada club deberá instalar en sus accesos y que, tras consultar una base de datos, rechazarán el ingreso de aquellas personas con antecedentes violentos, al tener que identificarse cada hincha, periodista, vendedor ambulante o dirigente mediante su huella dactilar y la tarjeta personal que se le dará al empadronarse.
Antes, incluso, el público tendrá que pasar un primer control policial, que verificará mediante un dispositivo de lectura si posee la entrada que corresponde y está entrando por la puerta correcta. En definitiva, nada muy distinto a lo que ya viene ocurriendo, sin impedir que, de prepo o por algún pasadizo siempre a mano, los barras logren pasar sin más identificación que su violencia.
Mientras el empadronamiento comenzaría en 15 días según adelantó Nicolás Russo, el sistema comenzaría a ser implementado en la primera fecha del Torneo Final que arrancará a inicios de 2013. En una primera etapa, sólo los estadios de Primera podrán instrumentarlo, aunque la idea es extenderlo al ascenso si tiene éxito. Algo que será muy difícil sin otro tipo de medidas.
¿Cuándo vuelve a jugar Boca Juniors luego del partido ante Fortaleza?
La última vez que Boca había recibido cuatro goles en contra en un torneo internacional
Con un doblete de Walter Bou, Lanús le ganó 2-0 a Metropolitanos de Venezuela
Talleres, a un paso de los octavos de final: los de Córdoba superaron por 2-0 al Cobresal de Chile
