La Sala I de la Cámara Federal confirmó el procesamiento de Sergio Marchi, presidente de Futbolistas Argentinos Agremiados (FAA), considerado partícipe necesario en una maniobra defraudatoria del manejo de fondos públicos en el marco del programa Fútbol Para Todos (FPT).
Como parte de la investigación la jueza María Servini ordenó allanar las cajas de seguridad de la fundación El Futbolista, que corresponde a Agremiados y encontraron más de dos millones de dólares que eran desvíos del fondo público proveniente del Fútbol Para Todos.
Además, la Cámara Federal ordenó que se investigue la supuesta responsabilidad de Carlos Zannini, exsecratario legal y técnico del gobierno de Cristina Fernández de Kirchner.
En la causa también figuran Carlos Alberto Pandolfi (presidente de El Futbolista y tesorero de Agremiados), Norberto Francisco Monteleone (secretario de la fundación y gerente General de Agremiados) y Raúl Pagano (gerente Financiero de Agremiados), a quienes Servini considera "participes necesarios del delito de administración fraudulenta agravada por haberse cometido en perjuicio de una administración pública".
En abril del año pasado, Pandolfi aclaró mediante un comunicado que los fondos recibidos en la entidad dependiente de Agremiados no tenían "origen ilícito", como respuesta al secuestro del dinero ordenado por la jueza en el marco de la investigación.