Real Madrid vivió otra noche mágica en el Santiago Bernabeú al derrotar 3 a 1 al Manchester City y clasificarse a la final de la Champions League tras superar en el marcador acumulado por 6-5 al equipo dirigido por Pep Guardiola.
Un primer tiempo sin emociones
Un cabezazo de Benzema a los 4 minutos entre los defensores centrales del City fue la primera opción clara para los locales que están obligados a ganar para acceder al partido definitivo de la competencia europea.
La presión constante de los dos equipos en los primeros minutos de juego no posibilitaron circuitos fluidos de juego.
Real Madrid llegó 3 veces al área del City a pesar de la presión constante del equipo inglés, pero ningún ataque inquietó demasiado el arco defendido por Ederson.
La respuesta no tardó en llegar. Una notable atajada de Courtois contra Bernardo Silva a los 20 minutos custodiando el primer palo y manteniendo su arco en 0 ahogó el grito de gol de los ingleses.
5 minutos después, un tiro libre a favor del Real Madrid en los pies de Toni Kroos apenas pasó desviado.
El juego se diluyó en presiones y contra presiones de los dos equipos y no hubo grandes situaciones de gol que incomodaran a los dos arqueros salvó una situación en la agonía del primer tiempo de Karim Benzema que tuvo un mano a mano que desperdició al tirarla por arriba del arco defendido por el brasileño Ederson. El árbitro pitó el final de los primeros 45 y los protagonistas se fueron a los vestuarios.
Increíble remontada del Real en el segundo tiempo
Los primeros 15 minutos del Real Madrid en el segundo tiempo estuvieron marcado por la agresividad que le permitió al Merengue acorralar en el arco al Manchester City.
El equipo dirigido por Ancelotti no pudo mantener la dinámica y allí empezaron a aparecer los espacios para el equipo inglés en la mitad de la cancha que se convirtió en una zona de transición, una situación de juego que los de Guardiola supieron sacarle provecho minutos más tarde.
El reloj marcaba 72 minutos, y tras una gran jugada individual de Bernardo Silva, el portugués habilitó a Mahrez que con un soberbio remate venció la resistencia de Courtois y estampó el 1 a 0.
Las situaciones para el City llegaron al final del encuentro con un remate de Cancelo y otra jugada inmediatamente posterior que los de Guardiola se perdieron abajo del arco de forma insólita.
A pesar de que el conjunto inglés estaba más cerca de liquidarlo, el Real Madrid sacó chapa y aprovechó su mística copera para empatar el partido tras una asistencia del intratable Benzema que habilitó al joven Rodrygo.
Los esfuerzos del equipo español no claudicaron y fueron por más. Tras una jugada individual de Carabajal, el lateral envió el centro que conecto nuevamente Rodrygo y para delirio de todos los Merengues estampó el 2 a 1 que alargaba el juego por 30 minutos más.
El Real siempre es el Real y con su mística no dejó de buscar el tanto que le otorgara el pase a la final de la Champions. La ambición tuvo su premio ya que Karim Benzema fue derribado en el área por Ruben Dias y el francés se encargó de patear desde los 12 pasos y facturó el 3 a 1 para los locales.
De esa forma, el local superó a su rival por un gol en el pozo acumulado (6-5) y accedió a la final de la Champions League donde enfrentará al Liverpool de Kloop.